I Found You (Steve Harrington/Eddie Munson)

Capítulo 31

-Dios, es repugnante - masculló Dustin observando a Reese dormir abrazada de Steve en el sofá.

-Yo creo que es romántico - respondió Max encogiéndose de hombros - ¿Hay noticias de Nancy y Robin?

-Volveré a intentar - dijo Lucas yendo a traer el walkie talkie - ¿no deberíamos despertarlos?

-Sí, yo me encargo de eso - Dustin fue a la cocina por un vaso de agua y lo aventó al rostro de Steve - Tonta y súper tonto es hora de despertar.

-¿Qué demonios, Henderson? - se quejó Steve poniéndose de pie con todo el rostro mojado.

-Es mi hermana y es mi sofá, viejo - Dustin frunció el ceño y abrazó a Reese - ¿Te sientes bien?

-Obviando el hecho de que a mí también me cayó agua sí, debemos apurarnos, Eddie quiere que le llevemos algunas cosas - dijo la castaña, pero no obtuvo respuesta - ¿me escucharon?

-No lo haremos - respondió Steve - Sabemos lo que puede suceder hoy, y es mejor que nos quedemos acá donde podemos ayudarte. Eddie puede esperar un día más.

-Steve...

-No, Reese, esto es serio.

-¿Y cuál es tu grandioso plan? ¿Que me quede encerrada aquí el último día de mi vida? Eso no va a suceder, Steve, además no nos tomará mucho tiempo - se quejó negando con su cabeza.

-¿Y qué prefieres? ¿Pasarlo con Eddie oculta en ese ático? - preguntó él en el mismo tono de voz que ella- Mejor te hubiese llevado ayer, en lugar de creer todas las mentiras de anoche.

-¿Mentiras? ¿De qué estás hablando?

-Sabes bien a lo que me refiero. No entiendo por qué ayer dijiste todo eso si al final en lo primero que piensas la mañana siguiente es en Eddie - se quejó Steve.

-Esperen, esperen ¿qué sucedió anoche entre ustedes? - preguntó Max curiosa.

-¡Qué asco! ¿En el sofá? - gritó Lucas poniéndose de pie rápidamente.

-No tendremos esa discusión y mucho menos ahora - aclaró caminando hacia el jardín - Iré a regar mis malditas plantas ¿o tampoco puedo hacer eso, Steve?

Cerró la puerta trasera con fuerza. Estaba furiosa con Steve Harrington, ¿cómo se atrevía a prohibirle salir de casa? Si realmente morirá hoy, quedarse asustada y esperando la hora final no era el plan que tenía en mente.

Buscó la manguera y la conectó al grifo para poder regar el jardín. Junto al árbol vio a su madre sonriendo.

-¿Mamá? ¿Qué haces aquí? Pensé que volverías todavía en un par de días.

-Quise darles una sorpresa a ti y a Dustin - respondió con una gran sonrisa. Reese se alegró de ver a su madre contenta, al menos tenía un buen semblante - ¿Me extrañaron?

-Claro que sí, mamá, siempre nos haces mucha falta a Dustin y a mí - dijo la castaña abrazando a su madre.

-¿Estás segura, Reesie? Las mentiras son malas y hacen que mamá se ponga triste, y ya sabes lo que sucede cuando estoy triste - susurró su madre mientras la abrazaba con fuerza.

-¿Mamá...?

-Vamos, Reesie, admítelo. Te alegras cuando no estoy en casa, porque crees que soy una terrible madre.

-Eso no es verdad - exclamó intentando soltarse - Mamá, me estás haciendo daño. No puedo respirar bien.

-Más daño hiciste tú al destruir nuestra familia - dijo soltando a la chica - Sacrifiqué mi felicidad por ti  y ni siquiera eso supiste valorar. ¿O crees que no sé que preferirías que Joyce Byers sea tu madre? Tu padre tenía razón: no vales la pena.