-Y EL MUNDO ENTRE NOSOTROS-
Souya siempre estuvo maravillado con el mundo exterior, sabía todo sobre los animales de aquel lugar y suele fantasíar con poder subir algún día sin ningún peligro y conocerlos el mismo, no solo en las fotos encerradas en...
Nahoya llevaba seir meses en el mundo no acuático. Seis meses en los que había tenido que aprender a usar su forma humana, tener gravedad de más y usar dos piernas para transportarse por el mundo. Aprendió que los humanos eran más diferentes a los de su especie de lo que pensaba, no solo vivían con gravedad y tenían dos feas piernas, al parecer no tenían ninguna habilidad especial. Es decir, Nahoya calentar o enfriar cualquier cosa que tuviera tan solo una gota de algo líquido, su hermano podía transformar los líquidos en hielo o gelatina además de compartir la habilidad de manejar el líquido a su antojo, Hakkai Shiba el mejor amigo de Souya podía convertir el agua en preciosos cristales con la forma que el modelara, Kazutora Haneyama su compañero de travesuras podía al igual que el cambiar la temperatura de los líquidos y también podía curar las heridas propias o de sus compañeros con estos, sabía también, que el hermano mayor de Hakkai podía extraer los liquidos de cualquier lado por muy mínimo que fuera y que Baji, el chico raro que siempre estaba en el lado humano rodeado de gatos y era muy buen amigo de Kazutora podía deshidratar o sobre-hidratar cosas. Los humanos no hacían nada como eso, nada que fuera cool a sus ojos, bueno, en los seis meses con ellos había visto cosas como algunos shows donde tocan guitarra, que se ve difícil y cool pero no tanto como hacer que el agua se transforme en vapor o en lindos cristales; Vio también algunas artes marciales humanas como el karate o el kickboxing pero...no de hecho les daba un punto en eso, las peleas humanas se veían mucho mejor que las peleas entre tritones y sirenas, digo, las piernas se veían mucho más estéticas y más prácticas para golpear que la cola de un tritón en batalla. Pero de todas maneras seguía sin gustarle de el todo lugar, solo tienen dos puntos a favor y uno de ellos es el internet pero ninguno cuenta tanto como el hecho de que su hermano está abajo de él, en el agua, solo había un Souya y justo por eso contaba por miles y miles de puntos a favor.
Nahoya contó con la ventaja de conocer a Baji y a Kazutora, no iban en su escuela, pero siempre estaba ahí, benditos mentiches que lo ayudaron a introducirse con mayor facilidad en el lugar humano, fue así que comenzó a llevar una buena relación con algunos de sus compañeros y entendió las reglas del lugar. El primer día de Escuela Nahoya hizo "amigos", su sonrisa gritaba socialización aunque en realidad no fuera a así. Ran Haitani fue el primero en acercarse al chico pelinaranja, Nahoya fue seco en un principio pero con el tiempo y la insistencia de Ran pudieron conectar muy bien, el hermano menor del Haitani también se acercó pronto y el círculo de amigos de los hermanos acepto al de ojos cerrados y amplia sonrisa rápidamente. A Ran le pareció muy interesante el chico nuevo, por eso se acercó de manera amigable, porque en realidad el no era así, a los nuevos solía gastarle bromas pesadas o meterse con ellos, eran muy pocos que contaban con la misma "suerte" de Kawata. Ran se dio cuenta de que estaba en lo correcto al ver al menor como alguien curioso e interesante, a pesar de su siempre amigable expresión tenía un carácter explosivo y bromista, algo cruel y sarcástico en su forma de hablar; Muchas veces usasba expresiones raras que nadie entendía y otras muchas él era el que se confundía por expresiones muy comunes, parecía que nunca las había usado o escuchado en su vida y sus reacciones ante ellas eran muy adorables no solo para el Haitani. Una vez Rindō menciono que olía a gato encerrado y el de sonrisa pregunto si los gatos eran esas bolas de pelo de cuatro patas con orejas en forma de triángulo y ojos amarillos, todos rieron por la forma en la que describió al animal, lo hizo realmente serio y confundido, una buena manera de alivianar el ambiente pesado en aquel momento.
Ran se confesó a Nahoya a los 7 meses de conocerse, se sintió realmente atraído y quería conocer mucho más a fondo del chico pelinaranja. El menor acepto sus sentimientos porque, raramente también había sentido una fuerte conección con el mayor y tenía mucha curiosidad sobre que era lo que implicaba una relación amorosa humana.
De la última vez que Nahoya había pasado unas vacaciones con su hermano pasaban ya casi 2 años, 2 años que estuvo posponiendo el encuentro de su novio y su hermanito menor, no por mal, simplemente nunca lograba convencer a Souya de salir en su forma humana con él para ir con su novio y amigos.
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Souya estaba un poco descepcionado de que Nahoya no le haya escrito en meses y el día que le escribe para encontrarse sea para pedirle que tome su forma humana y lo acompañara a casa de su pareja. La última vez que pasaron un buen rato juntos fue hace un año entero, Souya lo contó, su cumpleaños lo pasaron juntos el año pasado, luego de eso no volvieron a pasar más de 2 horas juntos, el cumpleaños de este año, Nahoya había cancelado su típica reunión de gemelos para pasarla con sus amigos humanos. Souya no estaba molesto, claro que no, estaba feliz de Nahoya viviera su vida sin el y tuviera más amigos, ( lo cual era lógico suponiendo que el mayor ya llevaba casi tres años lejos de él) pero no negaría que extrañaba mucho a su gemelo y estaba muy sentido con él por lo de su día especial.
Souya acepta harto de la insistencia de Nahoya pero pone condiciones para el encuentro con los amigos de su hermano.
1-. No piensa caminar, Nahoya hizo el intento por enseñarle cuando acepto la reunión, él lucho mucho por aprender, pero las piernas apenas lo sostenían y luego de un rato de rindió por las heridas que había conseguido por los intentos fallidos, la única manera en la que sus piernas se sostenían eran en el agua y eso era por un periodo corto de tiempo porque después de unos 4 o 5 minutos no podía mantenerlas bajo el agua y terminaba con su cola tornasol.
2-. Nada de comida humana. Nahoya le mostró las " maravillosas " comidas humanas pero solo le dieron asco y termino con un mal humor al probarlas.
3-. Nahoya le tenía que explicar de que podía y no podía hablar, si no, el no se hacía responsable de lo que pudiera decir frente a el nuevo grupo de Nahoya.
