La distancia que nos separa

Capítulo 15 - Nuevos aires

- ¡Estoy tan feliz amor por todo esto! No puedo creer que lo hiciste

- Lo hicimos, porque has sido el mejor novio del mundo, me has cuidado, acompañado y mimado, dijo una cariñosa Virginia a su novio.

- Lo sé, ahora solo quiero disfrutar nuestra vida juntos, ¡amor esto me ha hecho ver lo importante que sos para mí! Sos mi refugio, la dueña de mi corazón, cambiaste mi vida

- Ay rubio, que cosas lindas me decís, me vas a hacer llorar, Virginia continuaba emocionándose,

- ¡No quiero que llores! Es la verdad, me has dado mucho más de lo que imaginé que iba a tener, soy muy feliz a tu lado, no puedo imaginar la vida sin vos

- Por suerte, ahora voy a estar un rato más por acá

- Vir no digas esas cosas, que me asusté mucho.

- ya pasó mi amor, ahora miremos hacia adelante.

Esa noche hubo una gran celebración familiar, todos cenaron juntos, estaban felices por la joven  y se palpaba en el aire.

Pronto llegó el cumpleaños de Gaby, el número 24, otro motivo de celebración.

- Bueno amor, dicen que después de los 21, todo viene cuesta abajo, estás cada vez más viejito le comentó una divertida Virginia s Gabriel, quien entre sonrisas la levantó para besarla mientras le decía:

- Viejito te voy a dar, malcriada

- Siii por vos soy malcriada. Tengo una sorpresa para vos...

Gaby se sonrojó

- Mmm ¿qué estás pensando? ¡Pervertido!

- No es así... pensaba en una torta de chocolate, selva negra si es posible

- Pervertido culinario, me gustan tus ideas rubio, le dijo Vir sin creerle una palabra

- Bueno... no me creas, respondió él mientras fingía ofenderse.

Vir le regaló un fin de semana para ambos en un spa al pie de la montaña, con aguas termales y una hermosa bata

- Parece que vos sos la pervertida, me querés solo para vos y desnudo en el medio de la montaña

- No lo sé, quizás, pero me lo merezco, te extraño, extraño tu cuerpo y nuestros momentos

- Yo también extraño tenerte solo para mi

Cuando Mel supo que su hija quería irse un fin de semana sola con su novio, puso el grito en el cielo:

- Ni se te ocurra, no vas a poder ir

- Mamá, a ver, llevamos mucho tiempo juntos y te has ido de casa todos los fines de semana, has ido a Miami, Buenos Aires y dios sabe dónde más, entonces ¿qué tiene de malo? Nos hemos ido de vacaciones con nuestros amigos más de una vez ¿y ahora te molesta esto? ¿Es por el sexo? No estoy embarazada hasta ahora, le dijo divertida ante el enojo de su madre, tampoco pretendo estarlo, pero si quisiéramos hacerlo, tendríamos más que alguna oportunidad... de hecho años de ellas.

- Es cierto Vir, pero la verdad que es atípica la vida que llevan, tiene más bien que ver con el hecho de que deberías descansar aún

- Bueno puede ser que sea atípica, pero no le hacemos mal a nadie, he pasado por mucho este año, la verdad que lo que diga la gente me tiene sin cuidado y me gustaría mucho poder ir tranquila, sin que te molestes. Porque, aunque lo hagas, igual me voy a ir.  De cualquier manera, seguro te vas a la casa de Fede y no te vas a enterar, ¿entonces por qué justo ahora haces las cosas difíciles? Tampoco estoy pidiéndote irme a vivir con él