La distancia que nos separa

Capítulo 51 Vos, otra vez

Las dos parejas, Nico y Andy , Ani con Darío, le pidieron a Vir que fuera la madrina de sus hijos, festejarían un solo bautismo. Vir estaba encantada!! Su corazón necesitaba estas alegrías por lo que se dedicó de lleno a trabajar y a la preparación del bautismo. Luego llegaría semana santa, en ese momento Vir partiría con Roma rumbo a Miami a descansar 5 días.

La primer ecografía de su bebé fue muy bien, estaba en perfectas condiciones, aún no se sabía cuál sería su sexo.

Luego de le eco, a la que fue acompañada por Kate, Vir decidió comprar algunas cosas para su bebé, dejando las más grandes para el regreso del viaje y preparar la habitación con tiempo.

En tanto aprovechó la salida, compró un vestido celeste claro de corte midi, entallado y escote redonde, que marcaba su cintura y la hacía ver elegante y dulce para el bautismo de sus ahijados. Eran niños preciosos y los adoraba. Les regaló la ropa, así como gran parte del evento. Por supuesto les hizo preparar con el repostero del hotel, una mesa dulce.

La mañana del martes, previo a semana santa, Vir decidió ir a buscar todo y cambiarse en el hotel para llegar a tiempo. El bautismo era en la propiedad de Fede. Llegó temprano junto a Kate, se prepararon en la casa de los árboles, cargaron todo lo que debían llevar al almuerzo pero olvidó dejar firmado unos papeles antes de su inminente viaje. Kate la acompañó a firmar y la ayudó a cargar los últimos dulces que faltaban. Cuando estaban por irse del hotel vio llegar a Charlie... su corazón se desbocó . Él se aproximó como si nada, le dio un beso en la mejilla y le dijo:

- Hola Vir ¡wow estas hermosa!

Era cierto, Vir estaba maquillada y arreglada con mucho esmero.

- ¿Charlie? ¿Hola cómo estás? pudo apenas decir aún sorprendida, tratando de articular una frase de corrido, esto no se lo esperaba ni en mil años.

Dicho esto, mientras ambos se miraban, vio aparecer a una hermosa mujer más alta que ella, con una sonrisa preciosa, y una larga cola de caballo. No podía ser, Char había venido a su hotel con "esa mujer"

- Hola Sra. Evans, soy Atila Lawrence

- ¿Cómo está? Dijo Vir sin perder la compostura, un placer, ambas se dieron fríamente la mano.

- Vir linda, ¿podemos hablar un momento? Preguntó Charlie

- Lo siento, tengo un compromiso familiar muy importante, será en otro momento, siéntase en su casa, en la recepción los ayudarán, Charles, ya sabes cómo funciona todo, y dándose vuelta le dijo a la mujer:

- Hasta luego Srita. Lawrence que tenga una placentera estadía

Comenzó a caminar pensando en que no lograría hacerla llorar... ¿podía ser tan cruel? ¿Charlie haría algo así? No sería capaz de hacerle algo así, no... él solo estaba aquí por el bautismo, seguro se encontraría con los chicos, también estaba el hecho de que ella le había pedido que no la sacara de su vida aunque terminaran, en el fogón aquella noche, seguro que era eso. Por dios que idiota.

Kate estaba muda de la furia con ambos, pero se rehusaba a armar un escándalo, considerando lo bien que había manejado la situación su amiga.

Vir se dirigió hacia el auto con la frente en alto, con clase, mientras sus manos sostenían fuerte su bolso, Kate iba a su lado en silencio. En tanto caminaba de regreso a la casa de los árboles, donde la esperaba su guardaespaldas junto a la camioneta cargada, Charlie la alcanzó corriendo

- Espera Vir, por favor

- Charlie, te agradezco que cumplas tus promesas, pero no había ningún apuro

- ¿De qué hablas?

- Nada, solo tengo que irme

- Por favor, no hagas esto, no así, dijo mientras la tomaba de los hombros