Tiburón Martillo

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Evelyn despertó cuando su alarma sonó a las 6:30..

—Tenemos una reunión en el acuario de Hyperion Heights, no lo olvides… Le dijo la chica que había contratado como asistente. Una jovencita castaña que llevaba con ella 4 meses.

—Lo sé… Prometí llevar a Elián a ver los peces lo sé.  -Dijo la rubia empresaria… ¿Qué sabes acerca de mi reunión con las Bealfrey?

—Su asistente, Ivy llamó para confirmar esta mañana. Recuerda que antes del acuario a las 12. Debes ver a Victoria.

—Eres una excelente asistente, pero ¿y la niñera? Acaso, ¿esperas que vaya sola al acuario con el niño?.

—Evelyn la niñera canceló de improvisto. Al parecer traspapeló fechas y debió decidir entre los sobrinos de Courtney Cox y tú. .

—Y por culpa de scream perdimos… Odio a esa mujer, pero es una excelente actriz. 
Cancela todos tus planes que iremos al acuario…No pongas pretextos solo empujarás la carreola.

La chica puso una mala cara que disimuló enseguida. —Esta bien,  Evelyn haré lo que tu me digas. -Dijo comprensiva

—Te compraré soda,  una hamburguesa y palomitas. Te divertirás. - Dijo Evelyn.

Dio la tarde y ambas mujeres estaban en el acuario. Evelyn una rubia de ojos azules y complexión delgada compraba los boletos mientras su castaña asistente, también de ojos azules; esperaba al lado del pequeño niño que descansaba en la carreola.

—Elian… Hoy conocerás todas las maravillas que ofrece el mar… ¿emocionado?. El pequeño la miró fijamente

La chica castaña llamada Dolores, prefería la comodidad de su casa y un buen libro en sus ratos libres. Esta actividad la consideraba más como un pequeño favor a su jefa divorciada.

Evelyn llegó victoriosa con las entradas. Pasaron los torniquetes y empezaron a avanzar.  Miraron un poco la decoración del lugar que era una rueda de timón gigante con varias cuerdas anudadas alrededor.

Caminaron hasta llegar a los grandes cristales de los peses payasos.  El pequeño Elián sonrió, era un bebé adorable de apenas dos años.

—Mira Nemo y su papá están mirándote.- dijo Evelyn. Sosteniendo un poco cerca del vidrio.
—Te dan la bienvenida.

El pequeño tocó el cristal y una pequeña onda se formó en el tanque.  Todos los peces comenzaron a rodear la mano del pequeño, Siguiendola. Él bebé soltó una carcajada.

—Parece que les agradas. – Dijo su madre. Restándole importancia…-Una adolescente encapuchada sonrió al percatarse de que el chiquillo había utilizado magia para atraer a los peces. La chica llevaba una falda de cuadros, botas y una sudadera verde, los estaba observando desde que entraron al acuario.

El bebé desvío la mirada y noto una paleta de caramelo roja casi frente a sus ojos.. Una pequeña con el cabello del mencionado color pasaba a ver a los mismo peces

Dolores giró el cuello… Sintió que su corazón dio un vuelvo y se quedó sin saliva al ver a la atractiva mujer que llevaba de la mano a la pequeña.  Una pelirroja de ojos azules le regresó la mirada a Dolores. La mujer tenía un cuerpo torneado, se veía esbelta y en forma. Era la primera vez que Dolores admiraba la belleza femenina

—Oye.. Cierra la boca o te tragarás a un pez. -Dijo Evelyn rompiendo el encanto. —Y tú… ¿Quieres un caramelo no es así?

El bebé hizo un puchero y estiró la mano tratando de quitarle la paleta a la pequeña.

La pequeña lo miró sonriendo y le entregó una paleta amarilla más pequeña al bebé.

—Eres adorable… No puedo darte la mía, ya tiene mis babas. -Explicó amablemente

Kelly se acercó con algo de desconfianza. No esperaba encontrarse a la nueva identidad de Belle, pensó que ella no estaba hechizada, pero lamentablemente ese no era el caso.  Estaba atrapada al igual que mucho otros.

—Hola esta es mi sobrina Hope.

—Hola yo soy Evelyn y este es Elián… Se presentó Emma Swan. —Y ella es mi asistente Dolores, presentó a Bella

—Por cierto me llamo Kelly…

Zelena se vio tentada a detener el tiempo allí mismo e intentar besar a Belle para romper el hechizo, pero su relación nunca estuvo definida. A veces deseaba tener a alguien más despierto a su lado además de Hood.

—¿Quieren que veamos juntas el acuario? Se aventuró Evelyn a decir para darle una oportunidad de ligar a su asistente.

—Claro,  podemos recorrer la zona de tiburones juntas.. -Dijo Hope— Esa me da un poco de miedo.

Caminaron al fondo hasta hallar la exposición de tiburones. Un tiburon martillo pasaba por el cristal cuando Elián se acercó al cristal,  el tiburón comenzó a estrellar su cabeza en el cristal. El tiburón estaba furico intentando liberarse.

—El vidrio es muy resistente no teman.  -La cara de Zelena era de terror. No todos los habitantes de Storybrooke habían sido condenados a ser otras personas. Otros tantos vivían en cautiverio castigos peores. Killiam se conservaba atrapado en el cuerpo de un tiburón martillo y miraba a su familia intentando acercarse, sin lograrlo realmente.

—Pobre tiburón debe de sentirse atrapado en esa pecera gigante.. -Dijo Evelyn antes de girarse a ver otro tanque.

… .

Storybrooke, pasado

Regina había llegado a la torre del reloj para enfrentarse a la bruja que estaba atacando.  Killiam que caminaba por la zona. Tomó su espada y comenzó una intensa batalla para detener a la bruja que amenazaba con lastimar a la hija de su amigo, Robin Hood

—Tal vez ella no tenga un padre, pero tiene un tío que la protegerá hasta la muerte.- Dijo el pirata sosteniendo su espada frente al cuello de aquella bruja joven.

—¿Estas seguro de que quieres morir por ella capitán? -Sonrió altanera. 

Mientras desde el lado contrario del muelle se acerca Rumpelstiltskin

—Lo siento Garfio,  pero nunca te he perdonado por lo de Milah es hora de cobrar mi venganza.- Le lanzó una pócima que lo hizo transformase en un inmenso tiburón que Drizella con magia arrojó al mar

Zelena observó todo amordazada. Apreciaba al pirata y encontraría la forma de volverlo humano de nuevo.

—Buena suerte, querida. - Dijo Rumpelstiltskin refiriéndose a Zelena antes de desaparecer  entre humo negro dejando a la pelirroja y a su hija a su suerte.
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Saludos... Hasta ahora, ¿Qué les parece la historia?

Eterna Adicción. [Terminada] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora