🖤 𝑷𝒔𝒚𝒄𝒉𝒐 |𝑪𝒉𝒂𝒏𝑴𝒊𝒏

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SeungMin se acercó al mayor haciendo una reverencia mientras se acercaba más a él.

--- Buenos días, soy Kim SeungMin... Si vecino --- dijo el peli morado.

--- Oh, mucho gusto, yo soy Christopher Bang, pero puedes decirme Chan --- Respondió el más alto sonriendo y mostrando aquellos hoyuelos en su sonrisa.

Kim sonrió un poco y le entrego el pequeño postre en sus manos.

--- Te traje esto --- dijo dándole aquel postre.

--- Gracias, no te hubieras molestado --- Chan lo tomo y volvió a agradecer por el presente.

Miro con detalle al menor, era más bajo que él, su pelo era morado y vaya que le quedaba bien, pero lo que le llamo la atención, fue ver aquellos ojos, tristes.

Era psicólogo y podía ver claramente que algo estaba mal con el menor.

--- ¿Qué tanto me vez?... --- pregunto Kim siendo grosero sin querer.

--- Lo siento pero ¿Estás bien?

--- Estoy de maravilla.

--- Mientes.

--- ¿Qué?

--- No miras a los ojos, aprietas tus manos y no fijas la mirada sin importancia alguna, es claro que estás mintiendo.

SeungMin se quedó sorprendido ante lo que el mayor decía, ¿Quién era él para venir a decirle lo que claramente ya sabía.

--- Estás en depresión, te vez delgado, ojos tristes y te vez con bajos ánimos.

--- ¿Y a ti que te importa? --- pregunto el menor con un tono de agresividad.

--- Creo que lo empiezas a superar un poco, puedes enojarte, algunas personas en profunda tristeza no pueden... Pero tu ti, es un avance.

--- Escúchame bien, no me conoces así que no andes dicien-

El peli morado se quedó en silencio al sentir los brazos del mayor al rededor de él.

Un cálido abrazo para él, solo para él, en ese momento se sintió tan... Roto, no sabía cómo explicarlo pero también se sentía amado.

Su corazón latía de nuevo, se sentía tan sensible de repente, no pudo aguantar mucho y empezó a llorar en el hombro de Chan.

Coloco sus manos en la espalda del contrario, pegandolo más a él, escondió su rostro en el pecho del peli azúl.

Estaba llorando todo lo que podía, en aquellos brazos se sentía seguro, Bang se quedaba mirándolo, ¿Quién era capaz de hacerle daño a esa masita?

Simplemente se quedó en silencio, abrazando a Kim, debió de pasar algo demasiado doloroso para él como para llorar de esa forma.

El peli morado no se quería separar de Christopher pero aún así lo hizo, se alejo de aquellos cálidos brazos que prometían protegerlo.

Fue corriendo hasta su casa, subió hasta su habitación y se encerró nuevamente comenzando a llorar, tratando de calmarse.

Cada recuerdo, sea pequeño o grande, dolía realmente, no se sentía vivo, se sentía como si viviera en otra realidad que no es suya.

Lloro lo más que pudo hasta que finalmente se quedó dormido, aquel abrazo fue demasiado cálido, sincero.

Tanto, hasta el punto de querer volver a abrazarlo, quería desahogarse en aquel cálido pecho y aquellos brazos que lo llenaban de paz.

Pero simplemente se negaba, quería seguir manteniendo su orgullo.

Ya había anochecido, la madre de Kim preparo la cena mientras veía un programa en la televisión, uno de esos programas que solo señoras veían.

Mientras veía la televisión, vio aquel anuncio de una clínica de rehabilitación emocional.

Y... O por dios, ahí estaba, el psicólogo más joven y experto, Christopher Bang Chan.

Lo reconoció de inmediato, esa persona era su vecino, se quedó pensando unos momentos y después sonrió cómplice.

Quería una pareja para su hijo y que mejor forma de hacerlo que emperejarlo con un psicólogo.

Armaría una cita a ciegas y después los juntaría, Chan se veía buena persona para su hijo, SeungMin por más que se negara, iba a caer en sus encantos.

Apunto el número que vio en aquella pantalla y puso manos a la obra, armó su plan perfectamente, apuntando en un cuaderno.

Día, fecha, hora, lugar, todo estaba ahí, sería fácil de convencer a Chan, siendo un psicólogo accedería a ayudar al menor.

Lo difícil sería SeungMin, después de aquella perdida, no se animaba ni siquiera a salir de la casa, hasta el día de hoy.

Nunca había visto hablar a su hijo con otro hombre que no fuera... Aquella persona, y mucho menos haber aceptado aquel abrazo, por qué si, su madre estaba viendo todo desde la ventana.

Chan había sido elegido por ella para ser pareja de su pequeño Minnie, las cosas ya estaban casi listas.

Solo debía de convencer a las personas de aquella cita, estaba segura de que Bang no se negaría, pero SeungMin... Tendría que convencerlo de otra forma, tal vez con un engaño.

Mañana mismo empezaría con su plan... sin saber las desgracias que pasarían después.

Gracias por leer esta historia
Espero que les haya gustado
Nos vemos en el próximo
Capítulo <3