Profesor Iruma-Kun

Visitando a Azz

Otro día en la academia Babyrus, esta vez Iruma acompañó a Kalego a impartir clases e inspeccionar el examen para asignación de rangos.

Con un cabello ligeramente alborotado y su uniforme, el humano escribía la especie de los familiares que eran invocados por los estudiantes, le daba cierta gracia pues le recordó cuando invoco a Kalego y hasta el día de hoy, seguía siendo su familiar, aunque ya no era el único.

Los otros estudiantes susurraban ansiosos sobre Iruma, el chico que al entrar hizo desastres en la academia, desde primer año hasta el tercero.

Iruma paro de escribir cuando escucho "tercer año", Kalego también volteó.
—Oigan mocosos, estamos en medio de la invocación estén concentrados y atentos. —Les regaño, seguía siendo estricto.

Pero notó por unos segundos como la mirada de Iruma se oscureció, el siendo su familiar le dio un gran escalofrío, cierto peligro.
Iruma estaba en un trance y el odio que estaba dentro suyo había crecido de formas abismales, vio a Kalego.

"Debo controlarme"

Sonrió de forma cálida para su superior y siguió escribiendo. El perro guardián de Babyrus se desconcertó, desde hace unos años tenía la sospecha que su ex estudiante podía cambiar sus emociones y disfrazarlas pero no creyó que fuera así, hasta lo vio natural, la mirada se podía confundir como un regaño silencioso a un estudiante y después un buen gesto para el compañero de trabajo.
La invocación terminó y los alumnos se fueron, debía hablar con él, tanto convivió con el siendo su estudiante, que ya sabía cómo tratarlo.

—Iruma ¿te afectó la conversación de los alumnos?

—Sería mentira si digo que no... Pero no puedo dejar que me afecte así. —Explicó. — Estoy trabajando en ello, si algún día me dan estudiantes de último año, no puedo estar así cada que escucho "tercer año".

Le dio una ligera palmada en su hombro, una forma de demostrar el orgullo que le generaba un alumno que estaba superando sus traumas.

"Es joven... Espero este mocoso haga las grandes cosas que imagine"

No podía decir eso, a su ahora actual compañero de trabajo, ya que esa no era la ambición del chico, por un momento se dio una idea de ir a comer, podrían ir al laboratorio de Balam y comer algo para relajarlo, pero un comentario de Iruma le tomo por completo de improvisto.

—Estoy trabajando en ello, iré a ver a Azz hoy, lo extraño.

—¿Si? Que bien ¿estarás toda la tarde? — Sus años de experiencia, le permitieron tener una voz igual de severa como es lo habitual, pero por dentro, le dio nervios escuchar eso.

—Bueno... Hasta donde me tengan permitido estar, por el horario de visitas.

—Claro, si quieres, puedes venir con Balam y conmigo a tomar algo, no invitaría a mocosos pero tu ya no entras en esa categoría.

—Ohh.. Bien, claro, iré después. ¿A donde será?

"El estará más cómodo en la casa de Shichiro"

—En la casa de Shichiro.
—Bien, ahí estaré.

Después de esa conversación, se retiraron del salón de invocaciones, por parte del profesor más joven, tuvo que pasar a cafetería por un postre, para bajar la mala sensación y no cometer alguna locura, no podía hacer otra cosa como con ese estudiante en la inauguración; como profesor de Babyrus su deber era proteger a todos los estudiantes, esas palabras le hacían reír.

"Eso es mentira... Ellos no protegen nada.. Nada de nada"

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—Al fin terminé. —Celebró el peliazul, una montaña de papeleo, cortesía de los profesores, pero como siempre, terminó a tiempo. Parece que su supuesta habilidad familiar "evasión de crisis" evolucionó a "evasión de trabajo extra" sin duda, una maravilla.  —Eh terminado chicos, los veo mañana. Les veo más al rato Kalego-Sensei y Balam-Sensei.