Sin duda había sido el mejor día de mi existencia, irremplazable. Después de nuestro encuentro convencí a Anakin de que durmiera en mi cuarto, no quería desaprovechar la oportunidad de avanzar un poquito más en esa relación extraña que teníamos. Esperaba que al día siguiente habláramos de lo que había pasado, pero para eso tendría que dormir, cosa que no podía hacer. Anakin se había dormido casi al segundo de tocar la cama, pero yo no, tal vez era por la emoción que me embargaba de estar así, no lo sabía. Se le veía tan sereno y tranquilo durmiendo, en paz.
Algo en mi interior me alentó a acercar mi mano hacia su mejilla, mis dedos rozaron su sien y entonces pasó.
Mis ojos cambiaron de color y la oscuridad nubló mi vista. Cada cinco segundos una luz blanca me cegaba y oía voces, gritos...
—¡Anakin!
—Los he matado, los he matado a todos. He matado a los hombres y también a las mujeres y los niños. Son como animales, y los he matado como a animales —oí la voz de Anakin, pero no era su voz de siempre. Sonaba tan oscura, tan perdida...
—¡Tú no eres esto! —Oí mi propia voz y me alerté. Nunca me había oído así. Mi voz estaba algo cambiada, y se sentía la desesperación y la tristeza en ella.
—¡Al contrario! ¡Esto es lo que soy, te guste a ti o no!
Más fogonazos de luz blanca me cegaron y frases sin sentido comenzaron a oírse muy fuertes, abrumándome, a la vez que tapaba mis oídos y lloraba.
—¡Mientes! ¡Mentirosa!
Y entonces salté de la cama, cuando Anakin se despertó y gritó. No me había dado cuenta de que él estaba lleno de sudor, respiraba entrecortadamente y sus ojos estaban cristalizados. Giró su cabeza hacia mí, temeroso.
Oh, dios... ¿Qué he hecho?
Para mi mala suerte, él oyó ese pensamiento, y se alejó. Se levantó de la cama mirándome aterrado.
—No... Por favor... —Pero él no me escuchó y se dirigió hacia la puerta a paso rápido—. ¡Anakin, espera!
La puerta se cerró tras él y la habitación se quedó en silencio. No sabía en qué momento había comenzado a temblar, pero parecía que no se detendría.
¿Cómo ha pasado esto?
No entendía como era posible... ¿había entrado en su mente? Y si lo había hecho, ¿por qué le traje malas visiones?
No era la primera vez que tenía visiones. Como ya había entendido, podía ver el pasado, presente y futuro. Pero no sabía que al tocar la cabeza de alguien podía ver su pasado, presente y futuro. Pero no solo eso, sino hacer que esa persona también lo viera.
Por algún razón, había algo en la mente de Anakin, algo que me llamaba a averiguarlo. Cada vez que entraba en su mente solo veía dolor y sufrimiento.
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Dark Side [Anakin Skywalker]
FanfictionLa línea entre el odio y el amor, entre la oscuridad y la luz, es muy fina. El mundo se ve como blanco o negro sin saber que en realidad hay gris; un balance sostenido entre el bien y el mal. «Una vez fui tu aprendiza, Maestro, el único que me alejó...