capitulo final parte 1

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(Escuchen la canción se que la amarán).

El verdugo:

¿Saben que es  más fácil de matar?

Engañar. Eso era lo mejor que me salía, las personas me veían en la calle y no se podían ni imaginar quién era yo.

La satisfacción de saber que me podían tener de frente y nunca pensar que era yo.

Vi a Elena entrar por la puerta donde estaban las presas y me desvié por la otra escaleras que estaba detrás de la primera escalera.

<<Era básicamente una alucinación>>.

Oh querida Natasha, cuantas trabas me haz puesto; O eso crees tú.

Había matado a la mayoría de la elite así que sabía muy bien que estaba sola.

Rompí la puerta de una patada y me adentré al lugar solo para encontrarme con Natasha.

–Natasha, Natasha–sonreí–hasta que al fin nos vemos las caras, o bueno –me detuve moviendo la cabeza– no completamente.

–¿Quien rayos eres psicopata de mierda–me apuntó con la pistola.

–¿Aún no lo sabes?.

–Eres Elena, podría jurar que eres Elena.

–Mira las cámaras y date cuenta donde está Elena.

La habitación donde ella se encontraba, estaba forrada de monitores de alta tecnología.

Desde aquí se podía ver todo el pueblo con claridad e incluso la catedral.

La imagen que estábamos viendo era a Elena quitándose la máscara viendo a todas esas mujeres amordazadas y sus cuidadores amarrados del techo por las piernas con un corte en el cuello, toda la sangre corría como rio por el lugar y eso me hizo sonreír.

La imagen me pareció maravillosa. Era una obra de arte para mis ojos.

–¿Quien rayos eres tú?.

–El verdugo.

–Pero Elena–gira su cuerpo viendo una vez más como Elena deshacía de las cuerdas para soltar a la mujeres.

–Es mi seguidora–alardee–Al principio me pareció ofensivo que ella se  hiciera pasar por mi, pero después pensé que ella y yo queríamos el mismo objetivo. Ella comenzó con clanes pequeños y la verdad me gusto su iniciativa.

–El día que te reuniste con Alejandro...

–Fue Elena–interrumpí–creé los Robot pero ella los mejoró junto con su amigo, así que le doy un gran crédito. Es una mujer hermosa y valiente–reconocí–ya veo por que te mueres de la envidia.

–¡Yo no envió a esa mujer!–vociferó.

–Pues deberías por que tiene mas ovarios que tu–avance hasta ella–observé todos sus movimientos y toda su jugada fue limpia. La mujer creó un antídoto para la droga. ¿Te lo puedes creer?.

La Bratva #2 libro. [+21]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora