Capitulo 20.sangre por sangre

837 60 2
                                    

Alejandro:

–Señor están intentado entrar a la casa.

–¿Que?–se despertó Elena alarmada.

–Quédate aquí–le ordene–veré que sucede.

Me enfundé el arma y baje las escaleras encontrándome así a Dixon costa en la sala de mi casa con todos mis hombres de rodillas.

–¿Que crees qué haces?.

–Vine a por ti y no saldré con las manos vacías.

–Sabes muy bien que venir a mi casa donde está mi familia te hace mi enemigo ¿verdad? .

–Llegó tu momento así que camina y acabemos con esto.

Tome el aparato que tenía en mi mano derecha y lo activé poniendo así la casa en alerta.

–No vienes a la casa del rey y te lo llevas cuando quieras–di un paso al frente–no soy el rey solo por legado, lo soy por que soy astuto.

Lo vi apretar la quijada y levante la pistola que tenía en mi espalda.

–Dispara justo–me dijo señalando sus huevos–a ver si te lo pones y logras ser un mínimo de lo que soy yo.

–Estás acabado.

–No lo estoy.

–El juego no termina hasta que el rey lo diga Dixon y cómo te atreviste a venir a mi hogar pagarás muy caro tu desfachatez.

Acto seguido entraron al menos 20 de mis hombres por la puerta con armas hasta los dientes.

–Verás–me aclaró la garganta–he dejado que tú y Ronan tengan algo de poder por consideración pero me canse de toda esta mierda. O te unes a mi o te pones en contra.

Lo vi mirarme fijamente a los ojos.

–No soy el jefe de la mafia negra por legado ni por astucia si no más bien por que soy ágil e inteligente. Soy un Dios cuando de hacer negocios o buscar a alguien se trata.

–Déjate de mierda y decide que harás.

–Paciencia.

Lo vi caminar hasta mi y todos levantaron sus armas hacia el.

–Detente antes de que te peque un tiro.

–Yo no vivo para sobrevivir, más bien para tomar riesgos que nadie está dispuesto a tomar.

En un solo movimiento me quito el arma y se puso en mi espalda apuntándome en la sien.

–No saldrás vivo de aquí hagas lo que hagas.

–Vivir no es más que una estupidez–se carcajeó–prefiero morir de pies que de rodilla, por que nadie será digno de verme caer.

–¿Que diablos haces?–baje más la voz para que sólo el me pudiera escuchar.

–Buscarte.

–Esto no fue lo que acordamos con Natasha, estás rebasando los límites.

Natasha me contó de este maldito plan pero sabía que Dixon era demasiado loco para seguir las reglas.

–Tengo que meterme muy bien en mi papel si no quieres que tu mujer se de cuenta que hacemos tratos y vaya con Ronan a contarle.

–Elena nunca lo haría.

–¿Estas seguro?–se carcajeó –por que tengo entendido que era novia de Ronan hace años.

–Lo dijste claro <<hace años>>.

La Bratva #2 libro. [+21]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora