Detrás de cada final feliz hay alguien que llora, pero nadie se espera que quien sufre sea el protagonista y el gran campeón de su propio relato.
Esa era otra noche triste para el joven monarca. El rey Riddle Rosehearts se hizo la costumbre de mirar su ventana un rato indefinido antes de ir a dormir.
Cuatro estrellas brillaban en el centro del cielo nocturno al que daba su ventana. No las podía ver por demasiado tiempo sin que se deformaran por las lagrimas que se colaban en sus ojos.
Seguramente siempre estuvieron ahí, pero ahora tenían un significado.
Dos estrellas pequeñas, como jovenes de dieciseis años, pegadas e inseparables.
Una estrella un poco más lejos, que a veces se apagaba un poco pero que siempre que la veía parpadeaba graciosamente, como si guiñara un ojo.
Y por ultimo, en lo más alto, una estrella grande que parecía el lider y el protector de sus compañeras.
Su corona y lo que tuvo que sacrificar por ella pesaba en su corazón. Por fortuna, ese peso en su pecho subió a sus parpados, y ya en su cama se quedó dormido.
...................
...........................¿Fin?
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Historias Retorcidas (Oneshots Twisted Wonderland)
FanfictionCuentos y minihistorias sobre una vida normal y maravillosa en Night Raven College.