Parte 4: Elección

389 18 6
                                    


Las cosas no iban bien. Dos EVAS habían podido sostenernos mientras que un tercero estaba a punto de enterrar su lanza justo a través del pecho de la Unidad-01. Por más que peleábamos por liberarnos, los otros dos EVAS podrían dominar a la Unidad-01.

Entonces, sucedió un milagro. El EVA que estaba a punto de matarnos dejó de moverse por alguna razón y su cabina de contacto fue expulsada. También sentí que el EVA sosteniendo mi brazo derecho había aflojado su agarre. No traté de entender qué estaba pasando; sólo agarramos el cuello del otro EVA con nuestra mano libre y apretamos. Ése EVA era una vista bastante fea, ya que había clavos de metal enterrados en su cabeza gravemente dañada. Asuka no había sido tierra con él. No se hizo más bonito cuando su cuello de repente se rompió. Me dejó ir y sólo tomó un puñetazo en la espalda para asegurarse de que no iba a molestar a nadie nunca otra vez.

Ahora, solo queda uno. Se había estado quedando a una distancia de nosotros. Ya fuera porque no era necesario o simplemente porque había tenido intención de ver a los otros EVAS acabarnos, nunca lo supe. No es que me importe. Sólo tenía signos de daño moderado en el pecho. Éste probablemente había sido el último con el que Asuka había peleado antes de ser finalmente vencida.

Levantamos la lanza que había amenazado con perforarnos hacía unos pocos momentos antes y encaramos al último Evangelion blanco sobrante. Parecía estarnos mirando fijamente. Levantamos la lanza que estábamos sosteniendo y la sos tuvimos firmemente frente a nosotros. Nuestro adversario alzó su propia lanza como nosotros acabábamos de hacer. Su rostro como de reptil parecía darnos una sonrisa de burla.

"¡Muere!" grité mientras que la Unidad-01 rugió.

Nos lanzamos a nosotros mismos hacia el EVA blanco. Él corrió hacia nosotros. En retrospectiva, fue algo muy cliché. La batalla final, dos enemigos cargando el uno contra el otro, con la intención de matar al otro en un último ataque.

Los dos EVAS se encontraron por una fracción de segundo, luego se detuvieron después de unos pocos pasos. Ambos se quedaron quietos, ya no viéndose el uno al otro.

El EVA blanco entonces cayó en su lado, una lanza yendo a través de su pecho y saliendo por su espalda, donde su cabina de contacto había estado localizada.

En la cabina de la Unidad-01, mi mano fue a mi costado derecho. Mi camisa estaba roja con sangre.

La mano de la Unidad-01 fue a su costado. La lanza del otro EVA había rasgado la armadura y rasguñado la carne.

Lo habíamos hecho. Habíamos destruido la serie EVAS. Habíamos ganado.

Tosi algo de sangre. Ahora que se había terminado, pude sentir cuán gravemente mi pecho dolía. Me di cuenta de cuanto dificil se habia vuelto a respirar.

"Kaji... Rei... Misato... Asuka... creo que nos veremos pronto..."

Estaba quedando inconsciente cuando sentí al EVA ser sacudido y un agudo dolor en uno de mis hombros. Mis ojos se abrieron y vi... algo enfrente de mí. Era una forma humanoide, hecha de... ¿Luz blanca? Y estaba creciendo lentamente, más alto que un EVA. En el centro de su pecho vi la ya muy familiar forma del núcleo de un Ángel.

En shock, reconocí los rasgos de ese ser de luz. ¡Capellán!

El ser levantado una mano y un rayo de luz fue disparado de ella. Golpeó a la Unidad-01 justo en el centro de su pecho. Tosí algo más de sangre, antes de que el dolor finalmente me noqueara.

Desperté lentamente bajo un techo familiar. Un cuarto de enfermería. Peleé por un momento para mantener mis ojos abiertos, pero la débil luz lastimaba mis ojos y mis párpados estaban muy pesados. Me sentí entumido por todas partes, y muy mareado. Probablemente estaba bajo medicación pesada. Pero estaba vivo. ¿Cómo podría ser?

Lo que yo amo es... (Evangelion)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora