Liam
Desde ese día nunca la volví a buscar, no quería ningún contacto con ella y mucho menos pensé en que ella me buscaría porque había conocido a Vanessa y mi vida cambió para bien, ella estaba reparando algo que nunca ni siquiera rompió.
—¿Puedo pasar?
Ni siquiera un "hola", solo abrí la puerta y la reconocí al instante. Conocía a la perfección ese pelo rubio el cual había planchado varias veces y esos ojos los cuales me gustaba ver todos los días
—Pasa —digo inconscientemente. Ella entra a el departamento donde ya ha estado varias veces y solo la veo con su vestido rosa y con su pelo suelto mientras cierro la puerta. —¿Por qué vienes?
Se sienta y me mira fijamente —Te extraño
Dejo de respirar mientras la miro tratando de detectar alguna mentira en su "inocente" cara, después de todo lo que había pasado se atrevía a venir y decirme que me extrañaba... pero puede que si se arrepienta y si sea verdad que me extraña.
Lentamente me acerque a ella y me senté a su lado aún dudando de sus intenciones. —Se que tal vez no me creas, pero si te busque es por algo. Se que mis acciones no fueron buenas y he cambiado... por ti
—Aurora...
Me interrumpe—Liam quiero arreglar las cosas contigo —se acerca lentamente hacia mi y se detiene a pocos centímetros de mi cara.
No puedo retroceder, algo en mí impide alejarme de la chica que amé. —¿No crees que es demasiado tarde para arreglar las cosas?
—No —responde inmediatamente con mucha seguridad. Me quede mirando sus ojos y poco después sentí como su mano tomo mi mandíbula delicadamente—, aún nos queremos y estoy segura de eso
Quitó su mano y al instante se levanto solo para subirse arriba mío, trate de mirar a otro lado, pero con su mano en mi mandíbula hizo que volteara a ver como lentamente se quitaba los broches que tenia en su pecho. —Si no me deseas, detenme
No podía, simplemente no podía tenerla porque la quería y ese era el problema, que mi mente veía el veneno que tenía y el daño que provocaba, pero mi corazón era ciego y solo escuchaba lo dulce de sus palabras y promesas
—Aurora no...
Me tapa la cara con su mano —¿Acaso ya no me deseas? —destapa mi boca y agarra mis dos manos con sus dos manos y las dirige a sus muslos.
Su cuerpo se acerca más al mío y cierro los ojos al sentir sus labios sobre los míos, inconscientemente acepté su beso y lleve una de mis manos a su nuca para acercarla aún más a mí.
Se aleja un poco —Vamos a tu cuarto
Sonrío y la vuelvo a besar, cayendo en la tentación y rindiéndome ante ella. Aún me volvía loco, aún sentía algo, aún... la extrañaba. Llegó un momento en el que ella se había quitado su hermoso vestido rosa para mostrarme su cuerpo tapado con su lencería negra que le quedaba demasiado bien.
Separé mis labios de los suyos y empecé a besar delicadamente su cuello y después lentamente pasar a su hombro y detenerme por ver a Vanessa en la puerta. Aurora se percató de eso y sentí como volteo a la puerta donde se encontraba Vanessa con una bolsa de tela verde
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El amor tiene consecuencias
Teen FictionUn amor de la infancia que ella creyó que olvido pero que al regresar a su la ciudad donde creció descubrió que aun tenia sentimientos a él. Él nunca la supero pero al enterarse que tenia pareja, él decidió rendirse para que ella fuera feliz a lado...