𝗱𝗼 𝗻𝗼𝘁 𝗵𝗮𝘁𝗲 𝗺𝗲, nancy wheeler

004, La desaparición de Fred

Siguieron en silencio, hasta que vieron como en la entrada del parque de remolques se encontraba una patrulla, por obvias razones.

—Genial, ya nos arrestaran y ni siquiera he desayunado aún—hablo la castaña, cruzándose de brazos.

— ¿Podrías hacer silencio? —Nancy la miro por el espejo retrovisor— ¿O es mucho pedir para ti?

Annie rodó los ojos y la mayor detuvo el auto junto al policía, quien se acercó a la ventanilla del conductor.

—Hola, oficial—saludo Nancy, con amabilidad.

El hombre no le devolvió el saludo.
—No hay paso. Hubo un crimen.

—Si, mire, solo iba a... —se quedó pensando bien que decir a continuación—A ver a Max Mayfield, una amiga. Vive en este lugar.

—Solo se permite el acceso a residentes—siguio sin ceder.

Annie se inclino hacia adelante, logrando captar la atención del oficial.

—Hola, poli—saludo—mire, su mamá trabaja hoy. Solo queremos asegurarnos de que este bien, ya sabe, por lo del asesinato.

—Somos cómo su niñera... eh, niñeras—corrigio Fred rápidamente.

Nancy los miro ambos con la mandíbula apretada, claramente ninguno de los dos había respetado lo que ella dijo sobre mantenerse en silencio y dejarla hablar.

De pronto Fred comenzó a respirar un poco más acelerado, mientras su mirada estaba fija en un lugar.

— ¿Todo bien, anteojitos? —pregunto Ann, colocando una mano en su hombro.

Eso había sido extraño.

— ¿Estás bien? —pregunto el hombre hacia Fred.

El chico reaccionó y se tocó el rostro.

— ¿Qué? —pregunto algo asustado.

—Que si estás bien—repitio—Te ves un poco nervioso.

Nancy decidió intervenir, por las dudas de que el compartimiento de Fred atrayera sospechas.

—Esta un poco nervioso—hablo—Digo, igual que todos.

El policía miro alrededor y luego volvió su mirada a ellos.

—Dejare que vean a su amiga, pero no sé tarden.

Annie sonrió victoriosa, mientras se cruzaba de brazos.

—Oficial, le agradezco—sonrio otra vez con amabilidad. Puso el auto en marcha y luego se giro hacia Fred—Oye, ¿que fue eso? Dije que actuaras normal.

—Si, solo que... Lo siento—bajo la mirada.

Annie lo observo con el ceño fruncido y luego su mirada fue a Nancy.

— ¿Que sigue ahora, Sherlock? —pregunto.

—Primero, no me digas así—hablo—segundo, solo tendremos que golpear puertas, muchas de ellas—vio las cada alrededor.

Annie no era una persona a la que le apeteciera pasar tiempo con Nancy Wheeler.
Pero era una persona fan de los crimenes, de investigar, de seguir pistas. Simplemente amaba todo lo relacionado a eso.

Y anteojitos estaba de su lado, por lo que la convivencia no tendría porqué ser tan mala.

Estacionaron el auto y bajaron, se dividieron para cubrir más terreno. Fred fue a un remolque con banderas colgadas afuera, mientras Ann iba hacia una casa algo apartada.