💕✨Onceler✨💕

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Las mañanas en el valle eran bellas, con el hermoso cielo azul y el sol brillante. En el valle sur, entre los árboles de truffula estaba escondida una pequeña cabaña, de madera y piedra. Dos hermanos habitaban en la pequeña cabaña, un chico de pelo negro y otro de tonos amarillos y naranjos.

Riiign riiign

Sonaba un pequeño reloj despertador en el mueble de noche que tenían en una habitación, solo el ruido no tan fuerte pero sí estresante sonaba en toda la cabaña, solo estaba cumpliendo su función. Y vaya que sí había funcionado

El chico al escuchar su reloj sonar rápidamente despertó de su mundo de ensueño; solo dio un pequeño golpe al despertador para dormir unos minutos más, unos cinco quizás?, Diez no sonaba mal. Pero aunque quisiera el chico no podría, estar en su cama calentito todo el día, sin nada que hacer, el plan perfecto del chico.. pero sus planes fueron frustrados por la voz de una segunda persona que lo estaba llamando desde el piso de abajo.

-Once!!, Despierta ya!!! -grito aquélla voz que provenía de la cocina.

El nombrado solo dio un pequeño quejido y se levantó, no se dio la molestia de cambiar su vestimenta, con lo que tenía puesto el chico en pijama bajo las escaleras y fue a la cocina, aun perdido en el cansancio y el sueño.

-al fin que despiertas.. -dijo la persona que había llamado al chico de cabello azabache.

-Mmmm.. estaba muy cómodo en mi cama.. -dijo para después dar un bostezo.

-lo se, Pero ya se me hizo tarde para irme al trabajo... -dijo poniendo en la Mesa dos platos de huevos verdes con jamón.

-Mm.. mis clases empiezan tardé hoy... uh?.. Huevos verdes con jamón?.. pensé que solo los serbias cuándo venía Sam de visita.. -dijo mientras tomaba un bocado de su plato.

La pequeña costumbre que tenían los hermanos Lee con su amigo Yo soy.

-se me antojaron.. y quiero que le lleves un poco a Sam.. por qué hoy voy a llegar tarde.. -contestó tomando una jarra de jugó del Refri.

Al sacar la jarra del refri, un mareo fuerte haciendo que el joven quien se daliara y tomará soporte de equilibrio en la mesada. Pero había sido un movimiento muy repentino y brusco haciendo que el menor se preocupara y se asustara por aquel movimiento brusco.

-Noah!.. -grito asustado Once, mientras ayudaba a su hermano a tomar equilibrio.

Jadeó. -Q-Que pasó?... -preguntó tomando asiento en la silla del comedor.

Once con un movimiento levantó la camisa de Noah, tal vez eran las vendas otra vez.. Pero no eran las vendas ya que llevaba el binder que él le había regalado la semana pasada, algo que dejó con más dudas e inquietó al chico de ojos azules.

Estaba aliviado que Noah no estuviera usando esas vendas, pero estaba confundido y preocupado por él, si no era eso entonces que era?.. ¿Qué causó el mareo?

Once le bajó la camisa, se alejó de él y se dirigió a tomar un vaso y llenarlo de agua fría, de seguro con eso podría calmar y tranquilizar al peli naranja.

-Toma.. -le acercó el vaso.

-gracias.. -contestó Noah agarrando el vaso con cuidado de que no se le cayera.

-¿Cómo te sientes? -preguntó preocupado, El susto había despertado a Once por completo.

-Bien... -contestó mientras ponía una mano en su cabeza para aguantar unas pequeñas lágrimas.

Noah aunque fuera una persona fria y dura como su padre, por dentro era un pequeño niño con sueños y miedos.

-N-Noah.. estás llorando?.. -preguntó más preocupado.

Tus Ojos Azules (Oncest)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora