las cartas que nunca envié.

Carta #22: tengo miedo.

Este es el problema,
Yo jamás he sido amado de manera correcta.
Cada vez que elijo estar con alguien
Y me demuestra que vale la pena el riesgo,
Yo me arriesgaba para luego terminar en el suelo sangrando entre gritos ahogados y en llantos...

Puedo apreciar tu mandíbula apretarse cada que me acerco a tu rostro
Como si tuvieras miedo de no poder resistir
Puedo sentir tus músculos contraerse cada que sientes mi calor
Como si tuvieras miedo a lo que tu cuerpo quiera ceder y pedir

¿Qué tal si solo es un sueño el que estoy viviendo?
¿Qué tal si eres un extraño que solo busca aprovecharse?
¿Qué tal si solo soy una apuesta más en tu lista de conquistas?

Pero, aún así, demuestras que te importo,
Demuestras que me quieres
Y qué quieres saber de mí.
Te muestras dispuesto a estar junto a mí.
Y yo, aquí viéndote ir y venir,
Oyéndote decir:

"Tengo miedo de aceptarlo, porque tengo miedo de no ser suficiente para ti, de no darte lo que mereces... no quiero hacerte daño"

Entonces, me detengo y mi mente queda en blanco.
Entonces, era cierto todo lo que pasamos.
Entonces, no fue un sueño.
Entonces, todo fue real.
Tú eres real.

Ojalá supieras que estoy igual de asustado que tú cuando se trata de sentimientos, y que mi única escapatoria a no ahogarme y hundirme en ellos es escribiendo.
Ojalá supieras que yo también me mantengo a raya ante todo tipo de acercamiento tuyo, porque sé que una vez me rinda ante ti, ya no sabré cómo salir de ahí.

Tengo miedo, ¿tú lo tienes?
Porque te quiero, ¿tú me quieres?