Caminos cruzados (Daryl Dixon)

Capitulo 15: Tensión

Me desperté un poco agitada. Había tenido otra pesadilla. T-Dog ya se había ido de la caravana. Aproveché para asearme y más tarde, salí. Caminé hasta el lugar donde desayunábamos y me senté junto a T-Dog quien al verme depositó un beso en mi frente, eso me dejó bastante sorprendida y a los demás parecía que también.

—Saldremos a buscar a Rick y Glenn. Anoche no regresaron— Dijo T-dog.

—¿Puedo ir con vosotros?— Pregunté.

—No, tienes que descansar— Negó con la cabeza.

No dije nada más y continué desayunando. Después de eso comenzaron a preparar las cosas para ir en busca de Rick y Glenn. Irían Shane, T-Dog, Andrea y Daryl a por ellos.

Estaba sentada en la valla de los Greene, observando el paisaje cuando de repente noté como alguien me dio un par de golpecitos en la espalda, volteé y ahí estaba Daryl, con una expresión de molestia.

—¿Qué te pasa en la cara?— Dije mirándolo de arriba a abajo.

—¿Qué te pasa a ti? ¡¿Desde cuándo te llevas tan bien con...con él?!— Apuntó con su dedo al campamento mientras fruncía el ceño y apretaba su mandíbula con fuerza.

—¿Con T-Dog?— Aparté mi vista de él. —Somos amigos desde que llegué al campamento.

—¿Amigos? No parece que seáis amigos— Saltó la valla y se puso frente a mi —Parece que habéis dormido juntos y el beso que te ha dado hace un rato...¡¿Qué mierda ha sido eso?!— Me apuntó con su dedo con ira.

—Primero, no me hables así— Me levanté de un salto y me coloqué delante de él —¿A ti qué te importa lo que haga? Ayer me insultaste y ahora vienes haciendo preguntitas ¿Qué demonios pasa contigo?— Lo golpeé varias veces con mi dedo en el pecho con fuerza.

Daryl iba a decir algo pero se calló, apretó los puños con fuerza y me miró con rabia, pensaba que recibiría algún golpe en cualquier momento, pero no, solo pasó por mi lado y me empujó con el hombro.

Después de que se fuera, me senté apoyándome en la cerca, analizando lo que había sucedido, Daryl se estaba comportando como un completo idiota conmigo y ni siquiera tenía razones para hacerlo. Un rato después me fui de nuevo al campamento para desearles un buen viaje.

—Cuídate— Le pedí a T-Dog.

—Si tanto te preocupo, podría quedarme contigo— Me guiñó un ojo. Solté una carcajada y me alejé de allí negando con la cabeza mientras sonreía.

Antes de poder ir a por ellos, apareció la camioneta en la que se habían ido Rick y Glenn a toda velocidad. Cuando bajaron vimos que Hershel estaba con ellos. Maggie corrió a abrazar a Glenn dejando a su padre de lado. Lori y Carl fueron junto a Rick.

—¿Quién es él?— Pregunté al ver que había un chico con los ojos vendados en la parte trasera del coche.

—Es Randall— Me respondió Glenn.

Caminamos hasta la casa. Querían hablar sobre esto. El chico tenía una gran herida en su pierna y al parecer estaba desmayado.

—No podíamos dejarle allí, se habría desangrado o se lo habrían comido— Explicó Rick apoyado en el respaldo de una silla.

—La cosa se complicó— Añadió Glenn.

—¿Y que hacemos con él?— Pregunté.

—Le he reparado el gemelo lo mejor posible, pero seguramente tenga algún nervio dañado, no podrá levantarse hasta dentro de una semana— Hershel apareció por la puerta limpiándose las manos con un trapo.