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Narra Mi-suk

Me levanto y voy al baño para comenzar con mi rutina, dejo que el agua, caiga sobre mi cuerpo para relajarme un poco, siento mis músculos tensionados especialmente la parte de mi cuello.

Ha pasado un mes desde que estoy viviendo con Jimin y debo aceptar que no ha sido nada fácil. Min-Joon suele levantarse todas las noches llorando, he tratado que duerma en el cuarto que el mayor le preparo, pero no ha funcionado. Por otro lado la convivencia con él no ha sido fácil, nada le gusta y lo que más me preocupa es mi hijo, temo que en algún momento sea duro con él.

—Bebé es hora de despertar.

Me siento en la cama y comienzo a dar besitos en su rostro. Lo tomo y lo siento en mis piernas para acariciar su cabello, dejo uno que otro beso y veo cómo va abriendo sus ojitos.

—Buenos días mi vida— peino su cabello hacia atrás —¿Dormiste bien?

Él solo asiente y yo sonrió, me levanto con él y lo llevo al baño para darle una ducha, hoy comienza sus clases, así que quiero que esté bien despierto.

—¿Qué quieres hacer hoy después de clase?

Él se mantenía callado, por lo que supongo que aún tiene sueño, termino de enjabonar su pequeño cuerpo. Al terminar seco bien su cuerpo y vuelco al cuarto.

—Appa... ¿onde etá?

—Debe estar afuera, ahora lo ves.

Este último tiempo me había hecho una experta en mentir, estar en toda esta farsa me había acostumbrado a decir una mentiras una tras otra. Pero como siempre lo decía, lo que más me duele de todo esto es mentirle a mi hijo.

—Bebé recuerda que si está ocupado no debemos molestarlo.

Él hace un pequeño puchero, mientras asiente, acomodo su ropa y me levanto para salir de la habitación. Apenas salimos él sale corriendo como siempre y al llegar al comedor pega un grito.

—¡Appa!

El pelinegro lo mira y después me mira a mí, él lo toma y lo sienta en la silla que tiene al lado. Mi hijo comienza a hablar mientras come, sin embargo, el mayor ni le presta atención.

—Jimin...— lo llamó levemente no sé si este bien lo que voy a hacer, pero haría lo que sea por mi hijo.

—No te pido que a mí me trates bien...pero lo que si te pido que lo hagas con mi hijo, él no tiene la culpa de nada de esto.

Él no dice nada y se da la vuelta para salir del departamento, miro hacia atrás y veo que Min-Joon tiene un puchero, camino a él y me siento a su lado.

—Appa— sus ojos se cristalizan.

Lo tomo rápidamente y lo siento en mis piernas, él esconde su cabeza en mi cuello, yo acaricio su espalda y espero a que se tranquilice.

—Debemos ir a la guardería, vas a ver otra vez a todos tus amigos

—Suni.

Al decir eso veo cómo sus mejillas se sonrojan.Yo rio levemente y hago unas cosquillas haciendo que se ría.

— Con que Suni...

Él tapa su cara y yo rio por su reacción, lo bajo y le digo que vaya al cuarto para poderle lavar los dientes.

—Señorita Park, acá está las cosas del pequeño.

Yo sonrió levemente y lo tomo —gracias, pero puedes llamarme por mi nombre y no es necesario que lo haga.

—¡Estoy listo!

Volteo al oír su voz, él muestra sus dientes y yo me agacho para verlos. Él abre su boca y los reviso.

Papá por Contrato Donde viven las historias. Descúbrelo ahora