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Narra Jimin

Camino por los pasillos de la empresa con las manos en el bolsillo. Los empleados al verme me huyen devolviéndose por el mismo pasillo que venía. 

—Idiotas...

Empujó la puerta ingresando a la sala de juntas, veo que mis amigos ya están en esta. Camino hacia la punta de la mesa para sentarme en mi silla.

—Comencemos...

Alzo mi mirada al escuchar el silencio rotundo, miro a mis amigos y estos me miran atentamente.

—¿Por qué me miran así?

—¿Estás bien?

—Perfecto

Tae asiente y aclara su garganta para comenzar a decir los balances y logros que se han obtenido en el último mes. Hemos ganado mucho y eso me alegra porque le demuestro a mi abuelo que hizo bien en dejarme la empresa.

Si, finalmente la empresa es mía, ya puedo hacer con ella lo que quiera.

A lo lejos escucho las voces, pero no les presto atención. A mi mente llegan aquellos mensajes y fotos que he recibido en los últimos meses.

—Jimin...

Volteo mi rostro al escuchar la voz del castaño, aclaró mi cargante y asiento —sí, está bien, estoy de acuerdo.

Escucho una risa ronca y miro a Yoongi sin entender. Se levanta y salen de la sala dejándonos a Taehyung y a mí

—¿Vas a decir que te pasa?, llevas días de mal humor.

—Nada, solo que me tiene preocupado el nuevo proyecto.

—Es eso o es por Mi-suk.

Lo miro y niego —¿Por qué debería ser por Mi-suk?

—La última vez que estuviste así fue por ella y ayer te veías molesto con ella.

Me levantó y camino por el lugar —no es nada, ya te lo dije, estoy preocupado por el nuevo proyecto.

—Está bien, no sé te olvide que hoy es el cumpleaños de Eun Jae.

Sin decir más se levanta y se retira de la sala de juntas dejándome solo, me siento en la silla y me recuesto en esta dando un pesado suspiro.

•⁃•⁃•⁃•⁃•⁃

Se escuchan algunos gritos de los niños que a este punto me están enloqueciendo, parecen que los van a matar.

—Jimin ¿Dónde está  Suk? — pregunta Hanko

—Está ocupada habiendo unas cosas con su amigo.

—Appa, tengo hambe.

—Min-Joon ya comiste mucho. Sabes que no puedes comer más.

Él hace un pequeño puchero y sé que va a comenzar a llorar, y para ser sincero ahora no tengo paciencia para tranquilizarlo.

—Min-Joon ¿Quieres un poco de Kimchi?

Él asiente y Seulgi toma su mano para llevárselo hacia la cocina.

—Deberías dejar de tomar, estas con un niño pequeño. No es bueno que te ves así.

—No soy un bebé Taehyung, se lo que hago.

Tomo lo que queda en el vaso y lo dejo en la mesa para tomar mi teléfono al cual acaba de sonar.

Desconocido

Tu esposa te espera...

Sé donde está, no quería empeorar las cosas e ir. Mejor esperaría a que ya no este molesta y vuelva sola a casa.

Papá por Contrato Donde viven las historias. Descúbrelo ahora