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Narra Mi-suk

Veo cómo Jimin llega a mi lado, sus facciones se ven tensas y se que está molesto. Toma mi muñeca sin hacer presión y me hace detrás de él.

—Vaya hyung, no sé por qué sigues con ella. De verdad te vas a hacer cargo de un mocoso que ni siquiera es tuyo y de una...

Jimin no lo deja de terminar porque le da un puño logrando romperle la nariz.

—Con mi familia no te metes. Así que cuida lo que dices.

—¿Qué está pasando acá?— el señor Park llega a nosotros, su expresión nota lo molesto que está.

—Nada— Jimin me mira rápidamente para después ver a su abuelo —nosotros ya nos vamos.

Toma mi muñeca y me arrastra hasta salir del lugar. Al estar afuera pide que le traigan el auto para así irnos.

—Entra.

Me suelta para así ir hacia su lado y entrar al auto, repito su acción y entro al auto para así iniciar con el camino. El trayecto es un silencio rotundo, no es incómodo, pero prefiero guardar silencio, Jimin está molesto.

En estos últimos meses he notado que cuando está molesto, prefiere guardar silencio más  si nosotros estamos cerca.

Al llegar al departamento él va directo al cuarto mientras yo paso al cuarto de Min-Joon. Acomodo su cobija y dejo un corto beso en su cabeza para después levantarme y salir.

Al llegar a la habitación veo que Jimin no está, por lo que supongo que debe estar en su lado del closet. Hago toda mi rutina y finalmente después de unos diez minutos vuelvo a la habitación viendo a Jimin sentado en la cama.

Camino hacia él y me siento a su lado para tomar su mano. Cuando estaba manejando me di cuenta de que estaba lastimado en sus nudillos. Aplico un poco de alcohol para después poner crema y finalmente una gaza, para que no le duela cuando se roce con cosas.

—Gracias...

Le doy una sonrisa y cuando estoy por levantarme me detiene. Se acerca a mí y besa mis labios, yo le correspondo el beso que cada vez aumenta su intensidad. Nos separamos por unos segundos y él me quita las cosas que tengo en mi mano para volverme a besar.

Mientras nos besamos lo recuesto sobre la cama y me posiciono sobre él. Siento como lleva sus manos a mis muslos y los aprieta, me acomoda más sobre él y continuamos con el beso.

Las pocas veces que lo hemos hecho Jimin se ha comportado de una forma muy dulce conmigo, pero la forma en que me toca hoy es diferente.

Rápidamente, me quita la parte de arriba de mi pijama y me voltea quedando bocabajo. Siento sus besos por mis senos, mi espalda se arquea y de mi boca sale un pequeño gemido.

—No los calles, muestra como te hago sentir...

Sigue con sus besos a la vez que su mano va a mi entrepierna, siento sus carias que cada vez me vuelven loca. Veo que se aleja y se quita su camisa viendo sus tatuajes.

La primera vez que los vi, no lo podía cree, pensaba  que alguien tan estricto como él no puede tener algo así y bueno, las apariencias engañan.

No me di cuenta en que momento se hizo de nuestra ropa, solo sé que ahora estamos totalmente desnudos.

—Mierda...

—¿Que sucede?

—No hay condones— dice buscando en sus gavetas.

Se va al baño y escucho como abre las gavetas y otros compartimientos. Vuelve y veo que toma su ropa para comenzar a vestirse.

—Estoy...estoy tomando pastillas...podemos hacerlo sin protección.

Papá por Contrato Donde viven las historias. Descúbrelo ahora