¡Felix, no me agrada tu hermano! ও Miɳsuɳg

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Minho realmente odiaba las alturas, odiaba los aviones, odiaba Australia
Odiaba a su mamá por obligarlo a ir en avión por las alturas a Australia.

No lo podía creer, su mamá era ridícula, el se comportaba muy bien, ya había terminado el colegio e incluso estaba buscando un trabajo, habia aplicado a varias universidades, pero no, la señora quería que se fuera a Australia con su familia.

— Perdón, ¿Me da paso por favor? —Una voz femenina se dirigió a el—.

— Oh, claro perdón.

Minho se levanto de su asiento para que la señora se pueda sentar en su asiento del avión, era realmente hermosa, casi irreal. La señorita tropezó y Minho la ayudo a levantarse, como todo caballero haría.

— ¿Esta bien? —Pregunto el menor algo preocupado—.

— Si, lo siento, estoy nerviosa.

— No se preocupe —Minho le sonrió intentando alivianar el aire—. ¿Primera vez?

— Oh, no, pero voy a conocer a la familia de mi prometida, por eso los nervios —La chica le respondió mientras sonreía—.

— Entiendo sus nervios —El menor soltó una pequeña risa—. ¿Que tan bueno es su inglés?

— Eso forma parte de mis nervios, no se tanto inglés.

— Ah, me pasa lo mismo, no se casi nada de inglés y todo el mundo va a hablar inglés en ese lugar —Minho soltó un suspiro, no sabia como se las iba a arreglar—.

— Buenas noches señores pasajeros. El comandante y todos nosotros les damos las gracias por elegir este vuelo de la compañía Air Seoul con destino a Australia. La duración estimada del vuelo será de 10 horas y 4 minutos. Por motivos de seguridad y para evitar interferencias con los instrumentos de vuelo, les recordamos que los teléfonos móviles deberán permanecer desconectados desde el cierre de puertas y hasta su apertura en el aeropuerto de destino. Los dispositivos electrónicos portátiles podrán utilizarse cuando se apague la señal luminosa de cinturones, previa consulta a la tripulación. Les rogamos guarden todo su equipaje de mano en los compartimentos superiores o debajo del asiento delantero, dejando despejados el pasillo y las salidas de emergencia. Ahora por favor, abróchense el cinturón de seguridad, mantengan el respaldo de su asiento en posición vertical y su mesita plegada. Les recordamos que no está permitido fumar en el avión. Gracias por su atención y feliz vuelo.

Minho escucho como la azafata les daba la bienvenida, sabe que pronto les darían las medidas de seguridad. Se abrocho el cinturón y puso su celular en modo avion. Sus manos estaban sudando por lo que decidió frotarse contra sus muslos.

— ¿Nervioso? —La voz femenina del asiento de su derecha volvió a escucharse—.

— Si, no me agradan las alturas —Respondió el menor—.

— No te preocupes, las probabilidades de morir en un avión no van a más del 10%, es más probable morir en auto—La mujer intento tranquilizarlo pero no funciono mucho—.

— Ehh... —Fue lo único que salio de Minho—

— Lo siento, no soy nada buena para esto de tranquilizar a las personas y tengo que empezar a mejorar, muy pronto seré madre.

— Eso suena increíble ¿Cuántos meses tiene? —El castaño no pudo evitar preguntar—.

— Tiene 7 años, mi novia se embarazo joven por accidente, su novio la abandono —La pelinegra apretó sus labios—. Lo bueno es que me encontró a mi.