14

11.8K 863 2.1K
                                    

ADVERTENCIA:

Este capitulo tiene contenido +18

SI ERES MENOR DE EDAD LEER BAJO TU PROPIA RESPONSABILIDAD
SI VAS A TENER SEXO USA PROTECCION, NO SEAS PUERCO

Minho tiro a Jisung a su cama y le puso seguro a la puerta de su cuarto, no quería que nadie entrara y malinterpretaran las cosas

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Minho tiro a Jisung a su cama y le puso seguro a la puerta de su cuarto, no quería que nadie entrara y malinterpretaran las cosas. El mayor miro a al contrario, cada detalle de Jisung, soltó una risita y separó sus piernas para acomodarse justo en medio de ellas, su cuerpo lo obligó a llevar sus labios hasta el cuello de Han, empezando a  marcar y chupar aquella zona, se aseguró de dejar marcas.

— Minho —Jisung gimió el nombre del pelinegro al sentir sus labios atacar tan sensible lugar—.

El alcohol claramente circulaba por sus venas, ambos se encontraban algo ebrios y la probabilidad de que no recordaran lo que había pasado al día siguiente era muy alta.

Han se removía bajo el cuerpo de Minho, en uno de esos movimientos logró hacer que sus miembros rozaran, fue una sensación muy placentera por lo que decidió repetirlo, una y otra vez. Lee no se quedó atrás, Jisung lo había provocado demasiado, era su turno de actuar. Con una mano tomo las caderas de Jisung para simular embestidas.

— Ya... Minho, quiero sentirte —Susurro Jisung como pudo, su respiración estaba muy agitada y apenas podía formular oraciones con sentido—.

— Mi pequeño Sung —Murmuró Minho sobre su cuello, le gusto sentir la caliente piel del moreno contra sus labios y dientes—. ¿Qué quieres que haga exactamente?

— Ya sabes... 

— No cariño, no lo se —Lee se separó del cuello del menor solo para ver su rostro, se encontró la escena más caliente del mundo. Jisung estaba con los labios entreabiertos, sus ojos cerrados y unas pequeñas gotas de sudor hacían que su frente brillara. Oh, pero Minho no sabía que eso no era ni la mitad de cosas que disfrutaría ver esa noche—.

Jisung no encontraba las palabras correctas para que Minho haga lo que él quería que haga. Y claro que Minho lo sabía pero quería escucharlo de su boca.

— Yo quiero sentir placer Honnie...

— ¿Como yo puedo ayudarte con eso Jisunggie? —El casto beso que Minho dejó en sus labios no hizo más que desesperarlo—.

— Mierda Lee, maldito Lee, te odio —Jisung intentó zafarse pero el mayor no lo permitió—.

Lee lo beso, era un beso lento que hizo que Jisung se recostara completamente en la cama, como si de alguna manera a través de ese beso lograra hechizarlo. Había caído en el hechizo de Minho.

— Claro que me odias —Murmuraba sin separar sus labios, lo decía con burla y diversión—. Me odias mucho.

El gemido que salió de la boca de Jisung alteró la química del cerebro de Minho. Sin poder contenerse saco el pantalón de pijama de Jisung de una sola jalada. Jisung se sentó en la cama aun con las piernas abiertas, ambos se miraban con deseo. El moreno tomó la iniciativa para empujar a Minho a la cama y subirse en sus piernas, pasó sus manos por el torso desnudo de Minho. Mentalmente agradeció que se haya comportado como un niño pequeño hace unas horas y no se haya querido poner la camisa.

¡Felix, no me agrada tu hermano! ও MiɳsuɳgDonde viven las historias. Descúbrelo ahora