ENTRE VIÑAS Y CEREZOS 1

CAPÍTULO 8

Temprano en la mañana, a Taehyung lo despertó la vibración de su celular por una llamada entrante. Contestó medio dormido y de inmediato los gritos de Jimin lo despertaron por completo.

_ Taehyung, ¡¿qué diablos pasa contigo, estúpido?!.

_ ¿Jimin? ¿Qué pasa? ¿Por qué me gritas?.

_ ¿Cómo por qué? No me has llamado en tres días y hace horas estoy mandándote una decena de mensajes y no respondes. ¿Por qué eres así conmigo?_ le gritó furioso.

_ Perdón. Es que mi teléfono estaba en silencio. Aquí son las siete de la mañana, Chimchim.

_ ¿Y eso qué? Tu me prometiste que te mantendrías comunicado y al parecer olvidaste tu promesa a pesar que sabes que me preocupo por tí._ reclamó el rubio.

_ ¡Pero si ayer te mandé un texto contándote mi recorrido por el arrozal! ¡Incluso me respondiste que buscara algo menos aburrido que hacer!

_ Si bueno... es que... no sé por qué, pero de pronto me sentí preocupado por tí y cuando no respondiste me asusté. _ luego, suavizando su tono preguntó_ ¿Todo está bien? ¿No ocurrió nada malo?.

Taehyung no supo qué hacer. No quería contarle lo que había ocurrido en el restaurante, pero Jimin y él tenían una conexión especial. El rubio lo conocía demasiado y si mentía se daría cuenta.

_ Tae, ¿por qué estás callado?¿Me estás escondiendo algo?.

El castaño comprendió que tendría que contárselo.

_ Bien, te voy a contar algo, pero no quiero que te alteres._ le pidió.

_ ¡Kim Taehyung, soy tu soulmate, si algo malo ocurrió vas a contármelo y no me pondrás condiciones! ¡Y voy a alterarme todo lo que quiera, ¿me oíste?!

_ Yo y todo Buenos Aires te oímos, Jimin. ¡Ya deja de gritar!_ le gritó a su vez el castaño.

_ De acuerdo. Habla de una vez._ refunfuñó el rubio.

Tae tomó aire, respiró profundo y sin más opciones empezó a contar una versión suavizada de los hechos.

_ ¿Recuerdas que te conté que en Seúl me tropecé con un chico y que ambos caímos al suelo?.

_ Sí, ¿y qué con eso?.

_ Pues, que casualmente me lo encontré aquí en Chungcheong. _ confesó el castaño.

_ ¡No me digas que aún estaba enojado! ¿Te agredió?.

_ No, no es eso. De hecho nos hicimos amigos y es con él con quien he estado recorriendo Gongju.

_ ¿De veras? ¿y te metiste con él al bendito arrozal?_ preguntó el rubio con entusiasmo_ Porque me habías dicho que estaba muy bueno.

_ ¡Claro que no! O bueno...sí.

_ ¿Sí qué? ¿Sí metiste al arrozal con él o sí está bueno?

_ Las dos cosas. Fuimos juntos allí y, sí, está bueno. Tiene un cuerpo de infarto. Todo musculoso y ... ¡Pero no es eso lo importante ahora! _ dejó escapar un suspiro_ Anoche salimos a comer con él y un amigo suyo. Todo iba bien, hasta que fui al baño y... Un tipo se metió detrás de mí y se sobrepasó conmigo.

_ ¡Oh Dios mío, TaeTae! ¿Estás bien? ¿Qué te hizo?.

Jimin se escuchaba muy asustado y el castaño no quiso asustarlo más.

_ No te asustes, no me hizo nada. Solo se me acercó demasiado, pero en ese momento entró Jungkook, me lo quitó de encima y lo golpeó. Luego llamaron a la policía y se lo llevaron.