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❘❙❚ ISSUE #12 ░░░░ VOL. 2 ❛ COMPUND V ❜ ┆🌹
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—¿Estás despierta?
La joven dio una vuelta en la cama para poder observar la silueta de Ben al otro extremo de la habitación, en las penumbras de la madrugada.
—No lo estaba —respondió dejando que unos bostezos escaparan de sus labios. Después del día agotador que tuvieron, se había quedado dormida en cuanto su cabeza tocó la almohada.
—¿Escuchas eso? —Ben susurró elevando la seriedad—. ¿Lo puedes sentir?
—No, ¿De qué hablas?
—Solo escucha...
Rosie lo copió y se levantó de la cama, pasando las manos por su rostro para espabilarlo. Los sentidos todavía no habían despertado para identificar aquel sonido que alertó a Ben, no fue hasta unos minutos de silencio que comprendió la gravedad del asunto. Ahora lo oía. Un sonido lejano que se hundía en las entrañas del bosque, y, poco a poco, cobraba vida. El despliegue de las ruedas de los tanques militares raspando la carretera al pueblo. Era la alarma que la tenía durmiendo con un ojo abierto.
—¿Son ellos? —una segunda voz en su cabeza estaba rezando para que no lo fueran, pidiendo haberse equivocado.
—Si—afirmó Ben sin dudas—. Cámbiate.
Por un momento su cuerpo se paralizó esperando ordenes diferentes. El pijama de Ben fue cambiado por el uniforme militar en un parpadeo, mientras que la muchacha no quería colocarse el vestido. Se negaba aceptar que debían correr. El pueblo le había gustado mucho, las personas y las tiendas, el sol calentando su cabeza y la música. ¡Nunca iba a volver a la base militar!
—¿Qué estás esperando? Cámbiate y sal de la cama.
La insistencia de Ben la sobresaltó, siendo el empujón que necesitaba para despertar por completo. Hizo malabares para cambiarse lo más discreta posible, escapando de la mirada de Ben que, por suerte, estaba ocupado espiando por la ventana, atento al sonido venidero de los militares. El vestido verde que le había comprado a Susan era tan lindo como útil, se podía camuflar en el bosque.
—¿Vamos a escapar por el bosque? —Rosie entrelazó los dedos nerviosa y apretó el centro de la palma de su mano con el dedo pulgar de la otra, presionando hasta causarse dolor que interpretaba cómo la realidad—. ¿Ben?
