22.

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A la mañana siguiente partieron inmediatamente después de desayunar. 

Los niños y Tomoe decidieron viajar en el vagón secundario, dejando a las dos adultas a solas en lo que quedaba del viaje. No era mucho tiempo, solo un par de horas.

En general se mantuvieron en silencio durante la trayectoria, Marinette estaba algo adormilada debido a lo poco que durmió anoche.

No había podido sacar de su cabeza el momento que compartió con Kagami en el balcón, era difícil conciliar el sueño luego de eso. Sobre todo porque su cerebro estuvo empeñado en reproducir una y otra vez la calidez del pequeño cuerpo contra el suyo. 

No es como si fuera ajena a ello, pero esta vez se sintió más...

¿Más íntimo?, si, eso era.

Era diferente a sus interacciones anteriores en su dormitorio, esta vez Kagami se relajó contra ella, aceptando el abrazo sin tensión e incluso se reclinó.

Y eso la hacía feliz.

--Marsella a la vista--. La voz de uno de los jinetes la sacó de sus pensamientos.

Comprobó esto por su cuenta mirando por la ventana, efectivamente, en el paisaje ya se veía el inicio de la ciudad.

No sabía si estar feliz por llegar a su destino o molesta porque empezarían los tratados, recordándole que no solo estaba de paseo.

--Gracias Orson--. Respondió con calma Kagami a su lado.

Al menos tendría a Kagami a su lado.

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El momento en que terminó de hablar con el regente de Marsella y se dirigió a su estancia se hizo evidente que no podía tener a Kagami a su lado todo el tiempo.

La mucama se limitó a caminar detrás suyo mientras recibía y daba indicaciones a guardias y demás, así mismo los otros miembros de la familia Tsurugi se mezclaron con el resto de sus criados.

Sinceramente, era de esperar, considerando que una audiencia los rodeaba desde que pisó el lugar.

De nuevo, no era ajena a comentarios y sabía que Kagami no era alguien que disfrutaba estar en el foco del público. Era obvio que esto pasaría.

Eso no evitó que se fastidiara, aunque obviamente mantuvo su cara perfectamente amigable mientras seguía su camino a su habitación.

Una vez que estuvieron en los pasillos de la estancia, los sirvientes se dispersaron a diferentes habitaciones, dejando a los dos guardias principales y a Kagami para que la acompañaran a su habitación. 

El lugar era grande y bien iluminado, tenía una cama gigante, muebles brillantes y un armario que ya tenía adentro algunos de sus vestidos. En general era parecido a su cuarto en el palacio, a fin de cuentas, dormiría ahí diez días.

--Gracias, pueden retirarse ustedes dos--. Asintió hacia los guardias.

Ambos se inclinaron, saliendo de la habitación rápidamente.

En cuanto la puerta se cerró, Marinette centró su mirada en Kagami, quien estaba mirando algunos manuscritos en sus manos. 

--Alteza, creo que estos son indicaciones y papeleo a confirmar--. Dijo, acercándose para que los viera. 

Al menos eso fue lo que le dijeron al dárselos, pero no era algo que pudiera verificar por su cuenta. Tampoco informó a nadie de su analfabetismo, no lo creía conveniente.

"Alteza" -Marigami AU-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora