Cosas extrañas rodean a Naruto desde su nacimiento y ni siquiera el hokage sabe que es, hasta que un misterioso anciano llega a Konoha alegando que Naruto tiene magia.
Naruto conocerá muchas personas diferentes y descubrirá que es difícil tratar con...
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-debí despertarlos -ella menciona cuando la primera clase de defensas contra las artes oscuras termina, por esta semana básicamente estarían dando el plan de estudio.
-está bien, estaba algo cansado -Harry menciona mientras recoge sus cosas.
Durante el periodo libre Naruto decidió explorar el castillo y escribirle una carta al hokage y a tortuga.
Así que después de almorzar, dio saltitos alegres fuera del gran comedor, limpiándose la cara con la túnica.
Llego al vestíbulo principal donde estaba la entrada de la escuela y eligió uno de los caminos sin pensarlo demasiado.
Cuando llego a un lugar repleto de pequeñas personas preparando comida, ella parpadeo un poco en confusión, una de esas personitas se detuvo y miro a Naruto -hey no deberías estar aquí, regresa -ella se paralizo, pensando que ahora "esta es la cocina".
-lo siento ya me voy, pero... -ella volteo la cabeza como gatita confundida -¿Qué eres tú? -la personita abrió los ojos luciendo sorprendido.
-soy un elfo -dijo antes de que Naruto levantara la cabeza para mirar la concina de nuevo.
-ustedes cocinan todo wow -ella estaba impresionada, el elfo domestico había visto la sinceridad en esos ojos azules y la emoción por igual, suspiro, pero le sonrió un poco a la joven maga.
-anda ya, vete -Naruto asintió rápido y fuerte antes de dar media vuelta y salir de por donde entro.
La exploración continuo unas horas más, aunque se detenía un tiempo a hablar e incluso se había encontrado con Fred y George, antes de que Naruto la detuviera una mano sobre su hombro, haciéndole saltar.
-jovencita uzumaki -ella vio a la profesora McGonagall parpadeando un par de veces en vez de joven esta vez dijo "jovencita" era extraño tal vez joven también se le puede decir a una chica -debería regresar o podría perderse, no querrá que le pase lo mismo que a sus compañeros y llegue tarde -Naruto le dio un asentimiento dándose la vuelta completamente.
Esta profesora no la había tratado mal y le estaba ayudando para que Naruto no se equivocara.
Eso basto para que una sonrisa apareciera en el rostro de la niña -sí, sensei -la profesora parpadeo un par de veces, sabía que Albus había traído esta niña desde muy lejos pero no esperaba que fuera desde Japón.
La joven se fue lo más rápido que pudo entrando por una de las puertas que ella ya había memorizado.
Cuando llega a la sala de Gryffindor, corre a la habitación, donde encuentra a Neville sobre su cama leyendo algo, pero salta cuando Naruto abre la puerta de golpe -oh, hola Neville -el chico saluda nervioso y vuelve a su lectura haciendo que Naruto luciera confusa, pero niega con la cabeza antes de abrir su baúl, sacando un poco de papel y regresa a la sala donde encuentra un poco de tinta y una pluma.
