Mal día

64 5 0
                                    

Me levanto dolorida de mi espalda. No entiendo nada, estoy tirada en el piso. Recuerdo que Matt se durmió junto a mí. Me pongo de pie y lo veo dormido en mi cama, deduzco que me habré caído en la noche y ahí quede.

Fui en busca de unas tazas de café y volví. Matt ya había despertado y estaba sentado en silencio en mi cama. Su cabello despeinado y sus ojeras demostraban su cansancio. Me senté junto a él y le di una taza.

-¿Desde cuándo fumas?- preguntó dándole un sorbo a su café- no vuelvas a hacerlo.

-Desde ayer... era para liberar tensiones.. Okay. Gracias por traerme hasta aquí, quien sabe dónde podría haberme levantado.

-Yo no escribí esa carta- parecía ido, no me miraba a los ojos, solo miraba un punto dijo en el piso. -lo juro, esa no es mi letra.

-Está bien. Pero hay algo que pude comprobar con mis propios ojos... Yo, yo-las palabras no me salían-, te vi besarte con ella.

-No, no. Yo no la besé, ella me beso y yo luego la empuje, créeme- tomó mi mano y ahora no desviaba su vista de la mía.

Asiento. -Olvidemos esta conversación, yo ahora estoy mejor. Las cosas estarán mejor. No te sientas mal por mí- le dije cerrando mi puño y llevándolo a su lado, como para chocarlos en forma amistosa.

Me miró extrañado e hizo una mueca aparentando asco.

-No seas estúpida...- lo miro con un poco de enojo- no, no lo eres y supongo que sabes lo que siento por vos.

-Somos amigos Matt, está bien. Podemos volver a empezar, digo, empezar con el pie derecho.

-¿Amigos?- pregunto con un acento sarcástico. Claro que somos amigos. Pero cualquiera que tenga dos dedos de frente se daría cuenta de que me gustas. Que en este tiempo que me evitabas yo trataba de llamar tu atención...

-Entonces me querías...

-Todavía te quiero. ¿Puedes por favor perdonarme? Esa carta estoy seguro que fue Emilia quien la escribió. Debe de tener celos, si yo fuera mujer los tendría. Mírate, eres hermosa. Perdóname por favor.- le brillaban los ojos.

-Puedo aceptar y perdonar que besaras a alguien más, ya sabes, es algo físico. Pero si llegas a sentir amor por alguien más, eso... no podría perdonarlo.

-Mierda ¿en verdad pensaste que podría escribir y hacerte algo así? Jamás sería tan imbécil de expresar algo así en una carta, si de verdad sintiera eso por Emilia, te lo diría en persona. Pero por ella lo deje de sentir hace un tiempo y...

No lo dejé terminar su frase, lo besé como tanto necesité este tiempo.

-Sabes Matt, la inteligencia es relativa... hay idiotas buenos en física.

-Chhs mejor calla, ¿quieres saber que más hiciste anoche?

No me acuerdo casi nada.

-Te besaste con tu amiguito Pier, y no fue un besito-

¿Queeeee? Qué asco. Mis ojos se abrieron como platos. Claro, por eso tengo como un flash de el tan cerca mío.- No, qué asco. Lo siento.

Matt no paraba de reír -lo sé, no me enojo, estabas borracha.

¿Estás bien?- Asiento - No luces bien.

-Entonces deja de mirarme, tengo una resaca de la puta madre.

Pero sin darnos cuenta sucedió...

Comenzamos a besarnos y todo se fue de nuestras manos.

-No- grité, nunca estuve con un chico en mi vida.

El principio del fin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora