D I E C I S E I S

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la mujer pelirroja comenzó a llenar de besos el rostro de el albino, quien estaba completamente en shock. La mujer usaba una lencería bastante sexy, el albino reacciono y la hizo a un lado.

—Bienvenida a casa Mente, disculpa debo ir a trabajar.

—pero...¿¡Recién llegaste y te vas otra vez!?

—Mi vida es trabajo, que esperas.

—No podrías dejar a cargo a alguno de tus hermanos, he vuelto después de 4 años, quiero pasar tiempo contigo.

—Tendría que ser en otro momento mente, necesito alistarme.

—¡No veo el problema con que me atiendas primero!, Soy tu esposa!

—Lo se, Mmh... No quiero que peleemos acabas de llegar, no quiero verte enojada, ¿Supongo que quisieras venir conmigo al trabajo?

—con todos esos mocosos corriendo y gritando por ahí!?

—Pues no puedo descuidar mi trabajo, si no quieres ir lo entendere.

—No... Yo iré contigo, después de todo es algo parecido a una convivencia entre los dos.

—Jmm, no piensas ir así ¿Verdad?

La pelirrojo se apresuró a cambiarse y el albino aprovecho para tomar una ducha, claro cerro con seguro la puerta del baño, lo que menos quería era una sorpresita de mente.

Al fin dió un leve quejido de frustración, No era un sueño ni una pesadilla, su esposa estaba ahí.

—¡Maldición!

Empezo a golpearse levemente la cabeza con la pared varias veces.

Vaya que sería un día bastante difícil.










El francés llegaba a la academia junto a un pequeño grupito de adolescentes quienes se estaban peleando por al parecer un debate de que era mejor si el frío o el calor.

Al entrar, el japonés se despidió de su hermano, y el contrario le dió un abrazo para luego despedirse también de los amigos de su pequeño hermano, luego de eso se fue de inmediato.

—Bien solo queda ir a la primera clase antes de que nos cierre-traga grueso- y es Adamas-sensei... Es mejor apurarnos o nos hará realizar siete maquetas para mañana

—Si tan solo alguien no se hubiera tardado.-miro disimuladamente a la chica de coletas.

—Perdon, es que... No contaba con que llegaría mi periodo hoy.

—Es algo normal My lady no se preocupe, ahora ya es mejor apresurarnos.

Luego de eso los jóvenes se fueron corriendo hacia el aula correspondiente. Mientras aquellos amigos le rogaban a su profesor la entrada al aula, cierto francés caminaba leyendo un expediente por aquellos amplios pasillos, aveces solía estar tranquilo así que lo ayudaba para agarrar concentración.

Debía pensar en su siguiente movimiento, es obvio que debía encontrar una manera de revisar el despacho personal de Hades, cuestión que obviamente era complicado, ni modo de llegar a su casa y pasar como si nada tomar los papeles e irse, debía entrar siendo invitado y con cautela.

Un mensaje interrumpiria sus pensamientos.

~Nostriiii!!!
8:48am

~Hola Hestia, ¿necesitas algo?
8:48am✓✓

¿Quieres venir hoy a una cena especial en mi casa?~
8:49am

Obsesión| Sasaki x Poseidón © Donde viven las historias. Descúbrelo ahora