Capítulo 18

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Nicolás

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Nicolás

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No es común que esto me pase. No sé si eso me hace un patán o alguien afortunado, pero las mujeres no suelen evitarme, mucho menos después de algo como lo que compartí con Mailén.

Hace cuatro días que no la veo. Ni ha ido a trabajar, aunque me contesta los mensajes, pero no las llamadas. Mike me dijo que enfermó, que el cambio de clima y altitud la afectó. El médico le recetó algunas medicinas y reposo, pero ¿por qué no contesta mis llamadas?

Mis mañanas son una mierda sin ella. Entreno como sea, sólo quiero irme al departamento por si llega y me marcho tarde a la disquera porque espero hasta el último momento. Mike sólo me confirma que Mailén sigue descansando. Quise ir a verla, pero me insistió con eso del reposo y desistí.

Tal vez debí de ir sin esperar su autorización, pero no quise obligarla a verme si no lo deseaba.

—¿Estás aquí? —pregunta Dimas en el sofá de un costado.

Seguimos en el estudio de grabación. Hemos avanzado bastante estos días, creo que nos hizo bien tocar en el festival.

—Sí —suspiro—. Más o menos, ¿qué pasó?

Minerva quiso hacer un cambio a última hora en la canción. Volví a grabar y ahora han decidido que quizá se escuchaba mejor antes.

Dimas me pregunta cuál versión prefiero, respondo que la anterior y me gano que ponga cara de pocos amigos. Sin embargo, Cristal sonríe y dice:

—Dimas, ¿por qué eres tan terco?

—Porque es Dimas —contesto.

El vocalista pone los ojos en blanco.

—¿Por qué son tercos ustedes?

—Se escucha mejor la primera versión —comenta Cris—, pero como quieran. Si tanto desean la segunda versión, úsenla.

La guitarrista se incorpora y abandona el estudio de grabación. Su esposo se revuelve los rizos con exasperación.

—¿Están peleando? —inquiere Minerva.

—¿Y a ti qué te importa? —espeta Dimas.

Gabriel suspira.

—Pues que no sería nada raro, Mr. Patán de patanes —responde Minerva.

—¿Qué...?

—¿Tenemos que pelear ahora mismo? —interrumpe Cedric—. ¿Por qué no dejamos reposar esto hasta mañana?

—Estoy de acuerdo —Gabriel se levanta. Cedric lo imita—. Mike está con MalaVentura y se quedará ahí. Vamos a descansar.

No tiene que decirlo dos veces. Soy el primero en abandonar el estudio de grabación.

1. Una Melodía Inefable para los dosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora