Fɍøƶɇn Łøvɇ: Un Amor Congelado

CAPITULO N° 21: "LÁGRIMAS"

Elsa

El dolor se habia apoderado de mi, no podía tan si quiera coordinar mis pasos. Mi mente estaba nublada no sabia que o como reaccionar, si quiera alcance a escuchar las palabras de Jack antes de marcharse, a demas, esta era una noticia que no era facil de asimilar y menos cuando dependo de ellos emocionalmente, se me vinieron tantos recuerdos a la mente, fueron fugaces pero muy claros, estaba en instantes de segundos perdida entre mis pensamientos y recuerdos mientras mi rostro se inundaba con lagrimas incontrolables, pero, la repentina aparición de Mérida hizo que volviera en mi, no podía permitir que nadie viese a la nueva reina vulnerable, debía ser fuerte, pero las lagrimas se burlaban de mi, ellas salían sin control, aun asi me puse de pie. Mérida cuestionaba lo que habia ocurrido, aun asi solo le dije que enfrentaremos "la fría realidad", era momento de dejar de jugar en el palacio, había una triste verdad que afrontar y si yo iba a ser la nueva regente al trono, muchas cosas debian ser diferentes.

•••

Elsa y Mérida habian salido de la habitación, la pelirroja aun realizaba muchas preguntas que no tenían respuestas por parte de la platinada.

Gritos y llantos se oían abajo, la mirada de Elsa seguía perdida, aunque logro escuchar al regordete Kai decir que habia que anunciar, pues ya habia llegado un soldado de un reino pequeño cerca de arendelle, el barco donde navegaban el rey y la reina habia llegado a las costas de la playa en horas de la madrugada, un centinela que soportaba la fuerte tormenta pudo mirar como el barco sin rumbo, control y sin estabilidad se arribó muy cerca a donde estaba, habian cuerpos sin vida dentro del barco, soldados y servidumbre que al parecer trataron de ocultarse del peligro de "la tormenta" que ocurría afuera. El soldado sin pensar afronto la tormenta y fue rápidamente en busca de sus superiores, ese mismo Centinela fue enviado en la mañana a Arendelle, habia llegado a dar la triste noticia, informo primero a los soldados, que inmediatamente llamaron al teniente Mathias quien informo al ama de llaves gerda y al mayordomo regordete kai, quienes eran los mas allegados a las princesas, pero a Gerda esa noticia le callo como balde de agua fría, conocía a los reyes desde que eran unos niños, les tenia tanto cariño como si fuese su propia madre, el corazon del ama de llaves estaba en mil pedazos, kai intentaba consolarla, aunque el tambien estaba en llanto inconsolable.

-Teniente Mathias ¿Esta seguro?- cuestionaba el regordete entre sus sollozos.

-¡No hay duda!- dijo -El informante dio las especificaciones del barco y del los tripulantes aunque los reyes no estaban ahi, no hay indicios de que haya quedado alguien con vida- menciono.

El regordete seco sus lagrimas, pero aun asi se mostraba como cuando un padre pierde un hijo.

-¡Debemos anunciarle a las princesas!-

-¡No hay que anunciar nada, kai!- dijo la platinada con un tono fuerte y triste a la vez.

-¡Princesa!-

-¡Ya lo se, ya se que no estan, es mi deber ahora anunciarles a los demas!-

-¡Princesa, no es necesario...- pero el regordete no termino de hablar cuando la princesa desmayó, colapsó de un momento a otro.

La presión de lo que ahora debía afrontar, el casarse sin amor, el reinar sin la ayuda de sus padres, el afrontar lo que lleva en si sola sin el consuelo de su madre, el no saber como por no dejar que el peliblanco explicara lo ocurrido, la habia sofocado que sin darse cuenta cayó al suelo.

Aun Mérida no lograba comprender lo que ocurría, pero aun asi crecía la angustia en ella, el mirar a elsa desmayada, su llanto de desconsuelo y también el del ama de llaves, se imaginaba lo peor, fue en busca de Anna, para saber si estaba bien, y si asi fuese, contarle el mal estado de su hermana. Estaba asustada "¿Quien era ese chico? O ¿A que vino? ¿Que hizo?" Se preguntaba, pero necesitaba respuestas, no sabia si quiera el porque del estado de Elsa.