Reina de Tokio - Manjiro Sano (Mikey)

Especial

Mikey

No tenía muchos recuerdos de mi padre, a decir verdad, no lo recordaba con precisión, tenía tres años en aquel entonces..., luego, murió en un accidente, tal vez, no pasamos tanto tiempo juntos como padre e hijo, por ello, no duele tanto, aun así, me hubiera gustado tenerlo.

Fue así, con Shinichiro y el abuelo quienes tomaron ese papel, pero, luego llegó Emma, a pesar de que no tenemos la misma madre, era mi hermana, mamá la aceptó, podía verlas convivir en ocasiones, Emma no estaría sola.

Mamá siempre me pidió que cuidara de ella. La extraño demasiado.

— Manjiro – mamá había caído enferma, asique la iba a visitar en el hospital, podía verla una vez a la semana – cuida a Emma, recuerda que sólo nos tiene a nosotros.

— Si mamá.

— Me gustaría verte de mayor, con una linda chica, que te cases con ella, y tengas hijos.

— No mamá, las niñas son feas – reproché, a esa edad, me parecían desagradables las niñas, menos mi hermana.

— Cuando seas más grande.

Tal vez no lo entendía en ese momento, pero, sus charlas sobre chicas era algo que le gustaba dejarme en claro, nunca lo entendería, no hasta años después.

Luego, mamá se fue, ya no abría sus ojos. Y yo, trataba de que mis lagrimas no salieran, así era papá..., él era fuerte.

Me gustaban las personas fuertes.

Cuando creí que, por fin, todo parecía ir por buen camino, ocurrió ese incidente, Shinichiro también se fue, también me dejó..., ahora, tenía sólo a Emma, y el abuelo.

Mi sueño de ser una pandilla como la de mi hermano persistía, y tuve amigos, que me ayudaron con eso. Ayudaron a que siga ese sueño.

No fue mucho tiempo, que se empezó a escuchar un nuevo rumor, Tokio era grande, y la persona detrás de ese rumor, era todo tipo de pandillas, grandes, pequeñas, los que eran parte de alguna, todo hablaban lo mismo.

La Reina de Tokio, una mujer hermosa, pero a la vez temeraria, y muy cruel, había conquistado Harajuko ella sola.

— Kenchin, ¿qué opinas de ella?

— ¿De quién? ¿de la Reina de Tokio?

— ¿Será mujer? ¿será tan fuerte como lo dicen?

— No lose Mikey, pero, no pertenece a una pandilla como tal, tengo entendido que tiene vínculos con algunos pandilleros de alto rango.

— Ya veo, quisiera, conocerla.

— Es muy escurridiza, nadie sabe donde encontrarla, dice que cuando le interesa algo, vendrá a por ello.

La Reina de Tokio..., traté de llamar su atención por un año entero, pero, nunca vino, nunca apareció, a pesar que la Toman empezaba hacerse cada vez más grande, no le interesaba.

Pero, conocí a ese chico, estaba siendo molido a golpes, y su determinación, era muy grande, él era fuerte.

Takemichi Hanagaki, era su nombre, y primo de la persona que busqué por tanto tiempo, sin saber nada de ella.

Hasta que la vi, miraba a su primo, con tanta adoración, se veía enojada, y los que estaban a mi alrededor, parecían conocerla, le tenían mucho respeto, y ella, parecía conocer a algunos de ahí.

Hasta que sus ojos se posaron sobre mí, eran grises, de un color tan oscuros, que, en las noches, pasarían fácilmente a ser negros, eran tan bonitos, tenían un brillo en particular, pero, también su manera de ser, altiva, arrogante, amorosa, agresiva..., ella era todo un lio de pies a cabeza.