Nuestro Dramático taller

Amor de una madre

Dormido entre las sábanas, en la quietud del fin de semana Abraham estaba plácidamente a sus anchas, semidesnudo, el chico en calzoncillos se sumía en la inconsciencia hasta que su madre lo despertó casi de golpe abriendo la puerta: -Despierta, ya casi viene.

Al inicio el chico, aún anestesiado por su visita a las tierras de morfeo no articula nada y casi como se levantó estuvo próximo a volver a acostarse hasta que su progenitora vuelve casi sabiendo lo que su hijo estaba por hacer: -¿No me escuchaste?, levántate, que tu abuelo no quiere a un holgazán de nieto.

El chico friki abre los ojos con trabajo, va directo a cambiarse con la ropa que está en la silla, al lado del escritorio cuando vuelve a ser interrumpido: -Vístete bien, que debo estar dándote más vueltas a ti que a tus hermanas.

Sentía que su cuerpo dolía, aún tenía la rigidez provocada por el ejercicio el día de teatro en la casa de Alicia, por la poca actividad física que hacía: -Los Domingos son para dormir y despertar el lunes. -Decía para sí mismo.

El sábado no se sentía tan mal en la tarde de chicos, a decir verdad se encontraba con más vida que el mismo día de teatro. Recuerda cómo le hizo combos a varios de los chicos jugando juegos de peleas y ello le provocaba perderse nuevamente: -¿Ya estás? - Su madre volvía apurada.

Por la tarde de esa reunión recibió un pequeño encargo del maestro Fausto, tuvo que apartarse de la consola de videojuegos para recibir del maestro el siguiente mensaje: -hola Abraham ¿Cómo estás?

-Lo siento maestro, no pude enviarle el adelanto del manga el viernes porque estuve ocupado en...

-Descuida, eso es lo de menos, ¿Tu grupo de teatro tiene What's?

-Sí.

-Pídeles por favor la ficha de actor y mandamelas. Guardalo entre nosotros pero desde el martes voy a ser co-director del grupo su grupito de teatro.

-Oh, eso es genial maestro. Tendremos más tiempo para trabajar juntos...

-Sí, prometo que por este favor seguiré revisando tu proyecto el martes, pero por favor tráeme las fichas y haz un grupo aparte con los varones del grupo, los necesito para hacer una operación especial con ellos.

-Este, estamos reunidos hoy, nos pusimos de acuerdo para jugar en la casa de Ryu.

-Perfecto, podemos correr con ellos la operación Alpha para el resurgir del taller de teatro en la prepa. Ponlo en altavoz.

-¿Operación alpha?

Durante la noche del sábado el chico estuvo reuniendo las fichas de los demás alumnos. Varios como Alicia, Zorrito y María ya la tenían elaborada, otros como Andrea y Minerva se la mandaron el mismo día en la noche y Elías, Ryu, Tsuki, Alejandro y Fabiola quedaron de mandársela el domingo por la noche, esperaba terminado la comida con el abuelo pudiera imprimirlas para entregarlas al maestro el lunes.

Él para ese entonces ya se está peinando, cosa que pocas veces acostumbra y hasta parece raro verlo así para sus conocidos. A través de varias capas de gel los rizos naturales del chico tratan de ocultarse por un peinado hacía atrás. seguido se rasura con mucho cuidado de no volverse a cortar y al volverse a ver nota que esa persona frente a él en realidad no se parece en absoluto a él.

¿Para qué vendrá el abuelo?, se preguntaba, mientras bajaba las escaleras. Al llegar a la sala encuentra a su madre terminando de arreglarse, ella como matriarca tuvo que encargarse de levantar a todos y asegurarse de que se vieran presentables, hizo varias cosas para lograrlo, entre ellas peinar a las niñas, ayudarle a la abuela a vestirse y asegurarse que las ventanas de la casa estuvieran cerradas, la estufa apagada y la puerta del patio con seguro.