Rainy days and Mondays always get me down

196 26 15
                                    


Durante un tiempo hablamos de si decirles a mis padres o no. Tú eras el que decía que no querías decirlo por miedo a lo que me pasara. ¿Te preocupaba tanto?.

—No lo se Binnie. Es decir, quiero decirles porque pues ¡Soy su novio! Y no me gusta ser escondido.— Lo último lo susurro tan bajo que apenas lo escuche. —Pero no quiero que lo corran de su casa o algo así. Porque obviamente no me gustaría que viviera en la calle o algo así.—

—Lo se lindo, pero tengo que decirles antes de que lo sepan por otras personas. Sabes que no a todos les caemos bien y en cualquier momento esas personas pueden ir y decirles.— Me diste un tierno un beso en los labios y me abrazaste.

—Entonces...¿Qué haremos?.— Te alejaste de mi y yo sonreí.

—Les dire. Y si no lo toman bien, que se jodan, yo te quiero a ti y nunca te cambiaria ni por ellos.— Tus ojos se iluminaron y me besaste. Lo cual me sorprendió ya que yo era el que siempre tomaba la iniciativa.

—Me gustas, me encantas, te amo y...— Me pusiste la mano en la boca y te ruborizaste.

—No diga eso, que me pone nervioso.— Pusiste tus dos manos en tu cara para cubrirte el rostro.

—Ese es el punto.— Abrí la boca y mordí tu labio inferior sacándote un poco de sangre.

—¡No haga eso!.— Tú rostro era una mueca de dolor y enojo.

—Perdón. ¿Si?.— Negaste y te di un beso, tierno e inocente.

—Está bien, esta bien.— Me abrazaste y suspiraste.

No sé muy bien en que momento paso o porque paso

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

No sé muy bien en que momento paso o porque paso. Pero de un día para otro mi cuerpo y mente se debilitaron.

A los tres días estaba tan triste, pero ni si quiera sabía porque lo estaba. Me empecé a sentir miserable de un momento a otro. Me sentía insuficiente.

Tan insuficiente que empecé a pensar si valía la pena para ti. ¿Lo hacía?. Porque en mi mente no era más que un idiota sin futuro.

Te llame un momento quitando las lágrimas de mis ojos.

Hola Binnie.— Sonó tu voz y rápidamente una sonrisa cruzo mi rostro.

—Hola Hyuka. No se como decir esto.— Reí nervioso y sin ganas.

¿Pasa algo? No importa usted dígame.— ¿Cómo explicar que mi vida se fue en picada de un momento a otro?.

—No se como empezar, pero...Necesito un tiempo para recuperarme. No te estoy pidiendo que nos tomemos un tiempo o algo así, porque eso no existe. Solamente quiero decirte que necesito sentirme bien.— Mi voz se quebró.

De un momento para otro mi cuerpo ya no salía de la cama, no quería comer y no quería hablar con nadie. Me sentía tan insuficiente. ¿Lo era?. Mi cuerpo estaba cansado y también mi mente. Quería desaparecer en ese momento y no saber nada. Por eso decidí llamarte.

E-Esta bien Bin, si necesita algo aquí estaré para usted. Lo amo, mucho, mucho.— Sentí un nudo en la garganta y empecé a llorar.

—Tú corazón es frágil, frágil como él cristal. Es...Es digno de ser amado. Te amo Kai.— Colgué sin decir nada más.

Mire mi cama y estaba llena de pañuelos con mocos y estaba hecha un desastre. Mis labios estaban resecos y mi nariz roja.

No sabía lo que me pasaba, pero necesitaba tiempo para no joderlo contigo y no joderme a mi mismo.

Volví a acostarme  y cerré los ojos para dormir. Solamente dormía todo el día, pero en la noche no dormía nada.

No se en que momento empecé a sentirme así, no tenía explicación ni fuerza para explicarlo. Solamente estaba tumbado en mi cama, sin saber que mierda hacer con mi vida.

Escuche como mi madre venía a mi cuarto. Trate de estirar mi cuerpo hacia los audífonos que estaban en el mueble a un lado de mi cama, pero fue inútil, ya que mi cuerpo no tenía fuerza.

—Hijo, tienes visitas.— Tras decir eso. Una cabellera café y ondulada se asomó por el marco de la puerta. Era Kai. —Bueno, los dejó.— Cerró la puerta después de decir eso.

Yo no podía ver mi imagen, pero sabía que estaba horrible en ese momento. Hace unos minutos deje de hablar con HueningKai. ¿Por qué estaba aquí?.

Ni si quiera hice el esfuerzo por verlo, estaba tan agotado.

—Lo siento, solo quería ver cómo estaba. B-Bin, usted no está bien. ¿Qué le ocurre?.— Se sentó a un lado de la cama en el suelo.

—No lo se Hyuka, no se que es lo que me pasa ahora mismo.— Empezó a acariciar mi cabello mientras se hundía en el silencio pacifico.

—¿Puedo hacer algo para que se sienta bien?.— No veía su rostro, pero en su voz se escuchaba la preocupación que sentía por mi en ese momento.

Yo sabía que él pensaba que me iba a suicidar.

—No.— Dije secamente con la nariz tapada. —S-Solo quiero dormir y no despertar Kai.— Cerré los ojos una vez más sintiendo como sus dedos agarraban mis manos.

—Por favor, no diga eso. Yo lo amo y se que en este momento no está ocurriendo nada bueno en su vida, pero por favor no diga eso.—

Yo estaba extendido en mi cama, lo que no dejaba que tú te acostaras o sentaras.

—Por favor acuéstate a un lado mío y duerme. Trataría de moverme, pero no tengo fuerzas ni si quiera para alcanzar mi puto teléfono que está en ese mueble de ahí.— Señale con mi dedo índice tembloroso hacia el mueble. —Así que si me empujas o algo así, estaría feliz.—

Te levantaste del suelo rápidamente y me moviste. Ahora quedando yo sombre mi espalda.

Te recostaste en el lado que estaba desocupado. Pude apreciar el olor a frutas que desprendías, eras tan lindo. Pero ahora no podía decir nada. Me abrazaste hundiendo tu nariz en mi cuello.

—Lo siento, no se como ayudarlo.— Te tembló un poco la voz.

—No tienes porque hacerlo.— Mi mente cayó inconsciente en ese momento. Estaba tan cansado que no escuche nada de lo que dijiste después.

No sabía lo que pasaba y eso solo me cansaba en demencia.

Había caído en depresión y no sabía cómo salir de ahí.















Pobrecito del Chobis :cccc le quiero dar un abrazo.

𝘙𝘢𝘪𝘯𝘺 𝘋𝘢𝘺𝘴 𝘈𝘯𝘥 𝘔𝘰𝘯𝘥𝘢𝘺Donde viven las historias. Descúbrelo ahora