𝘙𝘢𝘪𝘯𝘺 𝘋𝘢𝘺𝘴 𝘈𝘯𝘥 𝘔𝘰𝘯𝘥𝘢𝘺

Extra

—Bahiyyih deja eso ahí, tu papá se enojará.— Escuche desde la habitación que compartíamos y rápidamente me paré para saber que estaba pasando.

Llegue con pasos rápidos hasta la sala y vi como Bahiyyih agarraba mis figuras de anime. Abrí los ojos como platos y fui hacia ella.

—Deja eso, cielito.— Trataba de no hacer movimientos bruscos o si no lloraría.

Ahora Hiyyih tenía cuatro años. Sabía caminar y hablaba por los codos. Era rubia y tenía ojos grandes, cariñosa y risueña. Kai siempre la consentía con postres o juguetes. Y como yo no sabía cocinar, le compraba dulces y le daba un poco de dinero ¿Por qué no?.

—Papito.— Fue brincando hasta Kai cuando me vio.

—¿Qué pasa Hiyyih?.— La cargo en sus brazos mientras yo revisaba mis figuras de acción. Tenía una hija y un esposo, pero todavía no se me quitaba lo Virgen.

—Quiero galletas.— Saco la lengua y le dio un beso de perro a Kai.

—No hagas eso, no hagas todo lo que te diga tu papá. El es malo~.— Lo último lo susurro como si yo no estuviera en la misma habitación.

—¡Pégale a tu papito Hiyyi! Me dijo malo, no lo permitas.—

Ella le dio un golpe en la frente y yo me empecé a reír, mientras Kai me miraba mal y hacía un puchero.

—Owwww, no es cierto amor.— Me acerque a él y le plante un beso en los labios.

—¡Malo Binnie! Pégale.— Le dijo a Bahiyyih y ella se tiró sobre mi para golpearme con sus pequeñas manitas.

—Si no me pegas y me das un besito en la mejilla, te daré dulces.— Susurre en su oreja y ella rápidamente dejo de golpearme para luego darme un beso en la mejilla.

—Tramposos.— Kai se cruzó de brazos y fue hasta la cocina para preparar galletas.

—¿Qué hacías con las figuras de papá?.— Puse a Hiyyih sobre mis piernas y empecé a acariciar su largo cabello.

—Son bonitas. Tienen colores muy bonitos y me dio curiosidad porque Papito siempre dice que no las agarre. ¿Po'que?—

Puso sus dos manitas en mis mejillas y empezó a moverlas.

—Porque me gustan mucho y si se rompen llorare. Me pondré como tú papi cuando se pierde su molang.— Hiyyih palideció al recordar como ese día casi nos mata a los dos.

—Entonces no los agarrare más.— Brinco fuera de mis piernas y fue corriendo a tropezones hacia la cocina.

Escuche un "Princesa~" de Kai y sonreí. Era feliz ahora y eso me daba tranquilidad. Después de la tormenta viene la calma.

Kai y yo tuvimos altos y bajos, como todas las parejas, pero siempre lo solucionábamos entre los dos. Ahora con una hija de por medio era más fácil todo.

La necesidad de ver cómo Hiyyih despertaba en medio de Kai y yo, era hermosa. Todo estaba bien de ahora en adelante.

Kai llegó de repente hacia donde yo estaba, para después sentarse a horjadas de mi.

—Tan lindo preparando galletas.— Di un apretón a su trasero y él sonrió.

—¿Sabes? Siento que ella será muy feliz con nosotros.— Empecé a besar su cuello.

—Claro que lo será, haré posible su felicidad y la tuya. Son lo que más me importa en este mundo y los amo con todo mi corazón.— Sus ojos brillaron y pude recordar vagamente como me miraba en secundaria, con los mismos ojos de borrego.

—Te amo.— Sonrió pinchando una de mis mejillas.

—¡Te amo!.— Vino corriendo Hiyyih y nos derribó abrazándonos por el cuello, mientras reía.

No es mucho, pero es k siento k tenía k tener un extra KAKWNJSS. Bueno ahora si m despido mi gente uwu.
Los tkmmmmm