Capitulo 7: Soledad

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“El amor a de tu vida, ten lo por seguro”

Esa fue la repuesta que le llegó.

Arrugó la nota y la boto. En realidad no sabía porque esperaba algo distinto.

Solo pudo suspirar.

—Oh, lo siento pero creo que no nos podremos ver hoy—Se disculpo la chica con una sonrisa nerviosa en su rostro—En verdad lo siento, Fyodor, pero creo que la próxima semana tampoco podré.

Había invitado a salir a Anna y esta fue la repuesta. Luego de unas semanas se enteró que ella había dejado la universidad.

“Si tú me invitas a salir no te rechazaría, eres demasiado perfecto como para rechazar te”

Muchas personas con el pasar de las semanas se iban alejando de el. Muchas le habían dejado de hablar y tratar.

—Cada día te ves mas cansado—Señalo el castaño mientras tomaba jugo.

—Lo se—Fue lo único que respondió.

Hasta de alguna manera el universo hizo que el horario de Nikola y el cambiará de una manera que nunca se encontrarán al menos que sea en la salida o entrada.

—Además  te ves mucho más miserable que antes.

—¿No podrías dejar recalcarlo cada cinco minutos?

—Solo digo la verdad.

Estaban bajo un Cerezo en la hora del almuerzo. El tiempo que pasaban juntos se incrementó de una manera considerable.

Estaba admirando a el peli-negro cuando se le ocurrió una idea. Termino de tomar su jugo y hablo.

—Estira tus piernas—Ordeno el castaño y el solo hizo caso.

Cuando el ruso tenía las piernas estiradas sobre el pasto y recostó su cabeza en ella.

—Se puede saber que haces?—Pregunto con una ceja alzada.

—Se veían suaves así que quería confirmar—Respondió con una sonrisa—Tu solo relajate.

Con eso dicho dejo que el castaño siguiera recostado en su regazo. Empezó a acariciar el cabello castaño y a intentar trenzar lo.

—Tu cabello es suave—Susurro

—¿En serio? Muchos me han dicho que parece alambre—Se río—Además el tuyo también es suave, muy suave para mí opinión—Extendió  su mano para tocar el pelo del contrario—De echo, me encanta tu pelo.

—¿Si?

—Sip, creo que deberías dejarlo crecer un poco más.

—Tampoco tanto, creo que está bien tal como esta.

Se quedaron en un silencio, no uno incómodo si no en uno reconfortante y tranquilo.

Cuando pasaba tiempo con el, alejaba un poco la soledad que había empezado a sentir hace tiempo.

”Aveces en serio te odio, pero luego veo tu sonrisa y se pasa ”

Esta nota vino también con otra foto, era cuando estaba desayunado está mañana. Y cómo siempre en esa foto estaba solo.

Tal vez a partir de ahora debería evitar lugares donde casi no haya gente.

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