Obsesión

Capitulo 25: ¿Final?

Dazai tenía la clara ventaja física. Así que tenía mucha más ventaja que el.

El castaño trataba de quitarle el cuchillo y el no se dejaba.

En medio del forcejeo beso a el menor y este se quedó estático por la sorpresa.

Le clavo el cuchillo por el costado y se lo quito de encima.

—¡Muerte de una puta vez maldito!—Grito con frustración. Estaba en una esquina a la defensiva.

El castaño se apretaba la herida para que no sangrara tanto y se levantó con dificultad.

—Eres una rata, tus labios son mi muerte—Dijo con una sonrisa y con sus ojos habían un brillo de locura.

Se abalanzó contra el más alto otra vez. Pero está vez no tuvo suerte y el castaño le logro quitar el cuchillo volviéndolo a tumbar a el suelo.

Se levantó rápidamente y corrió fuera de la cocina. Necesitaba tiempo. Sabía que Dazai se estaba desangrando lentamente.

Entro en la primera habitación que encontró.

La peor decisión que había tomado en su vida había sido ir a la cafetería ese día.
Si solo fuera negado la invitación como siempre lo hacía se habría ahorrado tantos problemas.

—¡Abre la puerta!—Se escucho un fuerte golpe—Quiero que lo hagas por las buenas.

No sabía que hacer, la habitación no tenía ventana y el contrario se había encargado de que no hubiera objetos peligrosos que estuvieron a su alcance.

En estaba habitación había cosas de jardinería y ya no estaban. El castaño ya había pensado todo esto y las había quitado.

—Vamos, estás perdonado. Olvidaré lo que hiciste, no tienes que temer.

El solo estaba recostado a la puerta con sus manos cubriendo su boca para no emitir algún sonido.

Ya lo había herido, no se podría dar por vencido ahora.

“Fyodor está perdido”

—Yo estaba destinado a ser tuyo y tu mío—Hablaba, aunque el no lo viera sabía que tenía una sonrisa  psicópata en sus labios—Yo soy todo lo que necesitas, no necesitas a más nadie, yo te puedo hacer feliz.

Un silencio.

“Ve a el infierno al que perteneces”

—Voy a volver a repetirlo, abre la puerta—Su tono le daba miedo, un sentimiento que ya se estaba acostumbrando  a sentir hace tiempo—Amor, no quieres saber las consecuencias que vas a tener si no abres—Amenazo— ¡FYODOR! —Grito—Abre—Hizo una pausa— la puerta, por favor.

¿Que mierda hacía? No lo sabía, por primera vez en su vida no sabía que hacer.

“La puerta no resistira”

—Prometo que ya no pelearemos más.

No lo creía. Ya había escuchado esas palabras antes y habían sido mentiras.

“Fyodor es drogado si piensa que podrá hacer algo”

—Se que estás asustado, yo también me he sentido asustado antes. Pero créeme, si estamos juntos ya no sentirás ese sentimiento.

El era la causa de ese sentimiento, si estaba junto a el era obvio que nunca desaparecería.

—No me hagas entrar por la fuerza.

No sabía que era peor. No podría retroceder.

—Voy a contar hasta tres.

Estaba jodido.

—Uno.

¿Abría la puerta?

—Dos.

Vio una cuerda y fue por ella rápidamente.

“Fyodor a perdido la cabeza”

Empezó a hacer un nudo y a buscar en donde atarla. Uno de los dos morirá.

“Fyodor se a quedando sin opciones”

—¡Tres!

La puerta fue abierta de una patada.

El estaba montado ya en un banco, lo único que tenía que hacer era saltar.
Vio a e l castaño de una manera desafiante.

—No lo hagas—Ordeno.

“Tarde”

Salto del banco. Sabía que solo había dos opciones o el castaño lo dejaba morir o lo salvaba.

Y en serio estaba prefiriendo morir.

“Dazai se está acercando a ti”

“Vas a volver a ese infierno si no haces algo”

“Intenta hacer algo”

Sentía como la cuerda lo asfixiaba y Dazai se acercaba a el.

“En verdad lo siento”

El ser humano en realidad nunca va a querer morir. Pero se había visto obligado a esto. Prefería morir que estar con Dazai.

Esto era mejor que lo que le esperaba si estaba vivo.