~~1389~~

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Londres Inglaterra, 1389
Taberna Caballo Blanco.

Muerte, la hermana de Sueño lo convenció de dar un paseo por el pueblo, a ella le gustaba vivir entre ellos, los humanos, por lo menos una vez cada cierto tiempo, decidió que ir a una taberna seria la mejor idea para que su hermano pudiera escuchar y conocer a los hombres (humanidad) más de cerca. Nada lograba llamar su atención, solo escuchaba chistes y chismes tontos sin sentido, hasta que finalmente una voz hizo que ambos hermanos giraran la cabeza.

-Yo ví la muerte -habló fuerte y claro, un hombre de aspecto sucio cómo todos ahí, cabello desaliñado pero una aura encantadora, al menos lo suficiente para ser escuchado por los hombres que estaban con él en la mesa.. -Perdí a media aldea por la peste negra, luché con Buckingham en Borgoña... No es que no sepa que es la muerte, la muerte es....

Esa breve pausa hizo que Sueño y Muerte escucharan con más atención, intrigados por lo que ese mortal estaba a punto de decir, sin embargo se llevaron una pequeña decepción.

-Estúpida.. -Esa respuesta no era lo que esperaban pero tampoco les sorprendía.
-Eres un tonto Hob -Habló uno de los amigos del orgulloso humano.
-Nadie tiene que morir, si la gente muere, es porque lo hacen todos, todos ustedes se resignan pero yo no, estoy decidido, no voy a morir. -La seguridad en su voz era alarmante, los hermanos eternos se mandaron una mirada cómplice.
-Hobs la muerte es inevitable -Replicó otro de sus amigos a lo que el nombrado ni siquiera reaccionó, al menos no con pesimismo.
-No sabes. Quizá tenga suerte, siempre hay una primera vez, tengo tanto por hacer, tanto por ver, mujeres que llevar a la cama, cerveza que beber, gente con quién beber..!! -Sonabá tan animado y convencido, todos se echaron a reír.
-Que harás con tanta vida..? -Otro preguntó curioso.
Hob levantó su tarro de cerveza y con una sonrisa dijo -Seguro hallaré mejores amigos que ustedes.

Todos empezaron a charlar rápidamente pero cuando vieron a un extraño de elegante y rara apariencia acercarse a su mesa todos le miraron algo confundidos.
-Lo oí decir que no tiene intención de morir? -su voz era profunda y varonil.
Los ojos de Hob le vieron de pies a cabeza tan rápido como pudieron, después le miró a los ojos y contestó. -Si. Así es
-Entonces, debe contarme cómo es, encontrémonos aquí otra vez, Robert Gadling, en esta taberna Caballo Blanco, dentro de 100 años.
-Cien años y yo soy el papa Urbano - Bromeó uno de los hombres en la mesa y todos rieron divertidos exepto Hob.
-No los escuche.. -Robert parecía estar totalmente de acuerdo, sus ojos brillaban, quizá de la emoción, estaban fijos en aquel hombre extraño. -100 años?
Morfeo asintió lentamente pero con firmeza.
-Entonces nos veremos en el año de nuestro señor 1489.. -Aquel brillo en sus ojos se intensificó y una enorme sonrisa se formó en su rostro.
Una vez más el Dios del sueño asiente está vez con una pequeña y fina sonrisa en sus labios, se da media vuelta y con forme avanza esa sonrisa se borra y se vuelve una expresión fría, le ve de reojo antes de marcharse. Todos los compañeros de Hob giran para verlo aún algo aturdidos pero burlescos.
-¿Quién era, Hobsie? -Pregunta curioso uno de ellos mientras bebe de su cerveza.
-No tengo idea, pero se lo preguntaré en un siglo.. -Ambos ríen, aunque luego la expresión de Hob cambia totalmente a una de seriedad, en el fondo tenía un presentimiento.

Información importante;
El capítulo uno de la historia está basado en la serie siguiendo sus diálogos originales en inglés, solo hubo un ligero interés superficial y curioso por parte de ambos.

El sonido de sus alasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora