Londres, Inglaterra. 1489.
Taberna Caballo Blanco.Las velas y las chimeneas alumbraban el oscuro y frío lugar, en una de las mesas del fondo junto al fuego estaban sentados Morfeo y Robert Gadling, el hombre ahora no tan mortal estaba hablando con algo más allá de sorpresa en su voz.
-¿Cómo supo que yo seguiría aquí?, ¿Quien es usted?... ¿Un mago?, ¿Un Santo?.. -Sus oscuros ojos estaban fijos en el extraño, se sentía curioso, ansioso, no podía explicar cómo se sentía luego de seguir vivo después de 100 años. -¿Un demonio..?
Todas esas preguntas solo hicieron que el Dios del sueño mantuviera una expresión sería y difícil de leer. -¿Hice un pacto con el diablo?
-No -finalmente habló, no le daría la respuesta que buscaba o al menos no sino le hacía las preguntas correctas.
-Entonces, ¿Por qué no morí hace mucho?, ¿Es una especie de juego? -Su corte de cabello se veía tan ridículo, se sentía extraño, en sus ojos y en su voz había un tono de tristeza pero en realidad no lo era.
-No es un juego. -Fué claro.
-Pero.. ¿Por qué? -Casi sonó dolido, estaba sorprendido de si mismo y de lo que pasaba. -¿Quién es usted?, -Poco a poco todo en su voz era un rastro de fascinación, quería saber más de él. -¿A qué viene?
-Vengo porque siento interés..
Hob alzó las cejas y inclinó ligeramente la cabeza, eso lo confundió un poco pero no le resultó aterrador, o asqueroso, de hecho sintió un suave cosquilleo en el abdomen.
-¿En mi? -Preguntó con cautela, el brazo de Morfeo reposaba sobre la mesa mientras que los brazos de Hob estaban pegados a su cuerpo, ni siquiera estaba bien sentado. Se le aceleró el corazón por unos segundos.
-En su experiencia -por la expresión en su rostro Hob creyó que quizá había dicho eso sin darse cuenta de lo que dijo o al menos no le encontró segunda intención cómo lo había hecho él.
-¿Qué tengo que hacer..? -Sonó suave pero ansioso.
-Nada, viva su vida a su antojo y cada 100 años, nos encontraremos en este día.
Las miradas de ambos de encontraron, Hob Gadling se acomodo en su lugar viendo hacia el frente, acomodó su brazo sobre la mesa y sintió por tan solo un instante la necesidad de tomar la mano contraria pero eso sería extremadamente raro, se tensó.
-Por que quiero saber cómo es.
-De acuerdo, le diré cómo es.. -Habló rápido para despejar sus pensamientos, concentrarse en la conversación.
El señor del sueño se inclinó sobre la mesa levemente, viendo al hombre con curiosidad, estaba seguro de que rogaría por morir o al menos eso fué lo que le había asegurado a su hermana Muerte en el año 1389 el mismo día en la taberna.-Es una maravilla..! -Exclamó emocionado.
Morfeo se sorprendió tanto que fué evidente, un moral feliz de vivir durante tanto tiempo?, Relajó los hombros.
-Todo está cambiando.
-¿En qué sentido?
Robert Gadling miró a su alrededor pero habló casi al instante. -Las chimeneas, que no te lloren los ojos por el humo todo el tiempo -Sonrió torpemente. -Y ahora tenemos unos trapitos para la nariz, antes usábamos las mangas -Dijo mientras señalaba las mangas de piel y cuero de su abrigo.
Un hombre exclamó a lo lejos, cómo un gruñido luego de perder.
-Y los juegos de Naipes -Se veía emocionado, sus ojos se pasaron por Morfeo tan solo un instante.
-¿Que inventarán luego? -Sus hermosos ojos azules observaron a Hob esperando una respuesta coherente.
-Ojalá algo para librarse de las pulgas -Tal vez dijo eso por los nervios o quizá solo quiso hacer una broma tonta para ver sonreír al extraño.
-Pero, ¿Que has hecho en éstos últimos 100 años..? -La curiosidad de escuchar al mortal era mayor que cualquier otra cosa en ese momento, solo quería saber porque aún quería seguir viviendo.
Hob dudó unos segundos, alzó las cejas para si mismo cómo sino estuviera listo para responder eso. -Lo mismo que antes. Trabajar cómo soldado, sino había guerras cada tanto robaba algo. -Se fijó en Morfeo solo para ver su reacción -Pero ahora me inicié en un rubro nuevo, se llama "imprenta" todavía no hace falta gremio, nunca hay gran demanda y es un trabajo arduo, pero es mucho mejor que ser comida de gusano. -El hombre pálido sonrió, una pequeña sonrisa pero lo suficiente para llamar la atención de Hob, el cuál también sonrió complacido.
-¿Todavía desea vivir? -Se veía extrañamente feliz de hacer esa pregunta.
-Sí. -Ni siquiera lo dudó.
Morfeo se puso de pie. -¿En 100 años, entonces?.
-Sí. -No podía apartar su mirada, 100 años más, le vió irse tan pronto como dijo que si. -No me dijo quién es..!! -Le preguntó en voz alta desde su asiento pero no recibió respuesta alguna, solo pudo ver cómo esté salía por la puerta.
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El sonido de sus alas
RomanceEl señor del sueño conoce a Hob Gadling por primera vez en una taberna en 1389, se narra su historia vista en la serie desde la perspectiva de Hob, después se narrará una historia inventada por mi de lo que me habría gustado ver luego de su encuentr...