Londres, Inglaterra, 1989.
Lugar que algún día fué la Taberna Caballo Blanco.Las cosas si que habían cambiado mucho en esos últimos 100 años, ahora todo si que era mucho más moderno, ahora había autos muy nuevos, y Hob tenía uno hermoso, y ni hablar de la música, había cambiado radicalmente el mundo, el hombre y Hob también, sin importar sus palabras de la última vez diciendo que seguía igual que siempre, las cosas eran diferentes ahora y Hob tenía que cambiar para bien.
-¿Puedo..? -La camarera se acercó a la mesa de Hob para tomar su orden.
-Estoy esperando a alguien -Le dijo casi de inmediato, ya había una cerveza en su mesa, bebió de ella mientras esperaba a su amigo. Se había arreglado, incluso llevaba un saco, nada tan elegante, y peinó sus cabellos de manera correcta, todo para que su extraño pudiera ver lo bien que se ve a diferencia de hace 600 años.
El tiempo pasó, ya iba por su segunda cerveza, ahora se veía inquieto, sus manos se movían algo nerviosas, golpeando el tarro de vidrio con sus dedos con movimientos repetitivos, ¿De verdad no llegaría?, No. Seguramente solo llegaría tarde, ¿Verdad?.La noche cayó y Robert Gadling seguía solo ahí sentado, con una copa de vino que no le duró mucho, ahogar sus penas en alcohol podría ayudarle en ese momento, aunque con tan poco no podría emborracharse, años de experiencia para beber habían servido demasiado, siempre fué un buen tomador. Se puso de pie y fué a la barra.
-Un Whisky, por favor.
-Tendrá que ser más específico, ahora hay todo un menú. -Habló el barman.
-¿El más viejo..? -Preguntó mientras sostenía del menú en sus manos.
-Un Glen Grant que podría ser su padre.
Una sonrisita apareció en los labios de Hob, escuchar eso era gracioso. -No aparento mi edad. -Y cielos que era verdad, aunque jamás podría decirlo en voz alta. El hombre sacó el vaso y lo llenó con aquel Whisky solo un poco, el inmortal le dió un trago y pareció gustarle, asintió en forma de aprobación.
-¿Espera a alguien?
-Me dejaron plantado. -Ahí estaba de nuevo, aquella sonrisa de dolor. Dió otro trago y se atrevió a hablar. -Discutimos, la última vez que estuvimos aquí. Fué mi culpa.. Ojalá pudiera decir que estaba borracho, pero solo fuí un tonto.
-Ví a muchos amigos pelearse en bares. Y a muchos más luego reírse juntos.
Hob sonrió, ojalá fuera tan fácil. -Quizá dentro de 100 años. -Y no era una broma, volvió a beber.
-Entonces tendrá que buscar otro bar, este se vendió para hacer más apartamentos.Cuando dijo eso Hob realmente temió porque eso pasara, tantos años, tantos recuerdos, era lo único que tenía con el extraño que tanto anhelaba ver. -El municipio quiere impedirlo, pero en este país, con dinero, haces lo que se te antoja.
Gadling no podía creerlo, si el bar era destruido entonces su extraño no podría encontrarlo, si algún día, o si dentro de 100 años el vendría aquí no podrían verse más en su cuna de siglos.
-¿Le sirvo otro mientras espera?
-Por favor.. -Asintió en respuesta, tenía que intentarlo. Seguramente de haber sabido lo que a él le pasaba en ese momento se habría sentido muy culpable.Hob decidió poner un grafiti en las láminas y paredes de la nueva construcción, indicando que habría una nueva taberna/posada, colocó flechas rojas indicando hacía donde ir, solo por si acaso.
Y ahí estaba, habían pasado poco más de 30 años y Hob no se rindió, lo esperó cada día solo por si él llegaba, estaba calificando lo que parecían ser exámenes, sintió una presencia familia, alzó la cabeza y lo vió ahí, era su extraño, tan hermoso cómo siempre, sus ojos se iluminaron y una sonrisa de alegría se plasmó en su rostro.
-Llega tarde. -Fueron sus primeras palabras.
-Parece que te debo una disculpa. Sé que es mala educación hacer esperar a los amigos. -Esas palabras hicieron que el corazón de Hob revoloteara, cómo si quisiera salirse de su pecho, fué inevitable sonreír aún más. Ambos hombres se miraron con una sonrisa, su extraño se sentó frente a él cómo siempre, verlo sonreír así solo logro confirmar sus sentimientos por él. Hob se había enamorado de Morfeo.Nota fuera de texto:
Finalmente terminé los capítulos con el material canon de la serie y cómics, después de estos seguiré la historia de ambos, primero haré sobre su conversación aquí en la posada y luego ya lo que sigue que será justo después de que Morfeo vuelve a la ensoñación.
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El sonido de sus alas
RomanceEl señor del sueño conoce a Hob Gadling por primera vez en una taberna en 1389, se narra su historia vista en la serie desde la perspectiva de Hob, después se narrará una historia inventada por mi de lo que me habría gustado ver luego de su encuentr...