DISCONNECTED | The Black Phone

Chapter 17: You're a Hero

OBSERVE COMO EL PERRO CORRÍA HACIA EL TROZO DE CARNE QUE ESTABA EN LA NEVERA Y NO TARDÓ EN DIRIGIRME A LA PUERTA.

Visualice por última vez toda la escena, el cuerpo inerte de Max, el del raptor, y como el perro estaba demasiado concentrado en su comida.

Mierda, no creía que este momento llegaría.

Empecé a subir las escaleras, sintiendo una demasiado extraña tranquilidad, y como mi manojo de nervios desaparecían poco a poco.

Giré, observando la puerta que daba con el exterior, no tarde en abrirla, y notaba mis piernas a punto de fallar.

A lo lejos pude visualizar a mi hermano junto a mis tres amigos, y casi jadeé de alegría.

Varios policías se encontraban entrando en la casa de delante, y parecía que nadie se diera cuenta de mi presencia.

Ignore aquello y me dirigí corriendo hacia mi hermano, sintiendo las lagrimas volver a correr por mis mejillas.

— ¡Justin!

Al correr me sentí tropezar, pero los brazos de mi hermano rápidamente me rodearon y me hicieron sentir como en casa.

— Maddison, gracias a dios que sigues con vida. -susurró, y pude notar lágrimas salir de sus ojos mientras besaba mi cabeza con amor.

— Jus-Justin, él-él...él me vio... -ni siquiera podía acabar la frase sin derrumbarme, y tan solo sentí a mi hermano apretarme con más fuerza hacia él.

— Está bien, Maddison, no debes terminar la frase, te entiendo...Joder, no puedo creer que Max hiciera esto, pensaba que quería ayudarme. -sollozó, acariciando mi pelo con cuidado.

Negué con la cabeza.

— Fue su hermano, él quiso ayudarme. Mamá, mamá igual, hablé con ella Justin. -susurré, aún sin creérmelo.

— Luego hablaremos, Maddison, ahora ya estás en casa. Creo que hay tres personas que necesitan verte ahora mismo. -musitó antes de separarme lentamente de él.

Asentí con la cabeza, dirigiendo mi mirada por encima del hombro de Justin, encontrándome con dos niños y una niña mirando en mi dirección con enormes sonrisas.

Al verme mirándoles no tardaron en correr hasta llegar a mi, y nos fundimos en un abrazo de cuatro, y Gwen no tardó en tirar del brazo de mi hermano.

[...]

LA POLICÍA TERMINÓ DE INSPECCIONAR LA CASA DEL RAPTOR Y SACÓ LOS CUERPOS CON UNA TELA ENCIMA.

Pude ver como uno de ellos se acercaba a nuestra dirección con una pequeña libreta, casi mirándome con lastima.

— Hola Maddison, necesitaremos hacerte unas preguntas.

Pude ver como mi hermano me miraba atentamente esperando mi respuesta, casi diciéndome que no tenía que hacerlo si no quería, pero asentí con lentitud hacia el policía.

— ¿Como te hiciste todas las heridas?

Bajé levemente la mirada hacia mis pies, avergonzada un poco por todo lo que me había pasado y con miedo a volverlo a vivir, recordando aquellas escenas por toda mi vida.