DISCONNECTED | The Black Phone

Chapter 18: Texas Chainsaw Massacre

— RECUERDAME POR QUÉ FINN, GWEN Y JUSTIN ESTAN AQUÍ.

Rodé los ojos ante el comentario de Robin.

Aunque ellos tres se encontraban en el coche de mi hermano y Robin y yo en la camioneta de su tío, estábamos a unos centímetros de distancia.

— Son nuestros amigos, Robin Hood, siempre van a ser como chicles. Y mi hermano no me deja ir sola a ningún sitio desde...eso, la verdad lo agradezco.

Pude notar como ante la mención de aquello mi acompañante se estremeció, a ninguno le gustaba recordar aquellos días, cosa que en el fondo agradecía.

Me alegre de que Robin me conociera tan bien y supiera en lo que estaba pensando, pues movió un poco su mano hasta que nuestros meñiques se pusieron en contacto.

Mis ojos se desplazaron hacia nuestras manos, y no pude evitar fijarme en como su bello del brazo se elevaba, al igual que el mío.

Alcé la mirada hacia él, encontrándome con sus cuencas oscuras ya analizándome. Le mostré una pequeña sonrisa, y él no tardó en repetir mi acción, terminando de entrelazar nuestras manos.

El sonido del grito de la chica protagonista interrumpió aquel momento, y no pude evitar sentir un dejavú al ver como su ropa estaba manchada de sangre.

Salté en mi sitio ante aquello, y de forma inconsciente apreté mucho mi agarre en la mano de Robin.

El carraspeo de este me sacó de mis pensamientos, cosa que agradecí enormemente.

— ¿Te gustaría ir al lago después de esto?

Asentí torpemente, viendo como el contrario no parecía tener la intención de sacar su vista de mi.

Él sabía lo que pasaba por mi cabeza, y sus acciones solo hacían que me concentrara en él, en nada más, como si lo otro dejara de importar.

— Claro. Aunque mi hermano querrá venir.

— No me importa. -susurró, negando con la cabeza levemente.- Tampoco que vengan Finn y Gwen, seguiré estando pendiente de ti.

[...]

— ¿ESTAS GRABANDO?

Ante la pregunta de Finney, su hermana asintió.

— No puedo esperar para enseñarles estos vídeos dentro de dos años.

Justin alargó su mano y la paso enfrente de la cara de los dos.

— Callaros, estamos viendo la película.

— Oh vamos, de los cinco eres el único que la está mirando. Ellos dos están demasiado pendientes del otro y nosotros de ellos.

— Os estáis perdiendo una de las mejores películas.

— Podemos ver la película otro día, pero este momento Mabin no va a ocurrir cada día. -alardeó Gwen, con la cámara de fotos en sus manos.

El castaño rápidamente observó a su hermana.

— Dijimos que se llamarían Roddison.

La morena le restó importancia con su mano.

— Roddison, Mabin, que más da.

El mayor se rió, aún sin apartar sus ojos de la película, viendo como la chica corría.

— Dios mío, deberíais sentiros avergonzados por esa mierda de nombres.

Finney le miró en forma de reproche, haciéndose el dolido por el comentario de su amigo.

— ¿Se te ocurre algo mejor?