1.¿Quién es Mahoma?

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El Profeta y Mensajero Mahoma (que la paz y las bendiciones de Alá sean con él) es un personaje conocido por muchas personas. Sin embargo, ¿hemos comprendido la verdadera historia de este hombre? Pues, ¡lamentablemente no! A partir de la escritura de estas líneas espero contar la historia real y auténtica, de la que nadie habla.

Desafortunadamente todos los libros sobre la historia del profeta (que la paz y las bendiciones de Alá sean con él) tratan sobre las batallas que él dirigió, lo que ha creado toda una generación de radicales y extremistas. Y lo que es peor aún es que estos no representan más que una pequeña fracción del asunto. Calculemos juntos : el Profeta (que la paz y las bendiciones de Alá sean con él) vivió en Medina 10 años. Durante estos años, dirigió 27 batallas. Pongamos que cada una llevó 20 días, lo que hace un total de 540 días. ¿Qué pasó el resto del tiempo? Los libros que he mencionado antes redujeron 10 años a 540 días. Por otra parte, la totalidad de su mensaje duró 23 años. Estos libros reflejan únicamente un 7% de su mensaje, por lo tanto nos falta el 93% de la historia. También el Corán contiene 6263 versos, de los cuales solo 430 hacen referencia a la Yihad y a las reglas de adoración. En otras palabras, solo el 7% de los versos. Aún más, contamos con 60.000 citas auténticas que transmitió durante su vida y solamente 4000 tratan de la Yihad, otra vez únicamente el 7%. ¡Eso significa que nos estamos limitando a conocer solo el 7% de la historia! Con este libro pretendo presentar el 93% restante con el propósito de dar a conocer la parte escondida de su historia, de los años de construcción, educación, sensibilidad, amor, amabilidad, generosidad, compasión, perdón, tolerancia, etc... Así que, acabaremos conociendo finalmente, no al hombre de guerra, sino al hombre de gran corazón, un ídolo a seguir.

Nosotros como musulmanes amamos y respetamos a todos los Profetas y Mensajeros de Alá. Por eso debemos siempre seguir el ejemplo de sus vidas para afrontar los retos de la vida cotidiana. Por ejemplo, Jesucristo (que la paz y las bendiciones de Alá sean con él) es un ejemplo a seguir como hombre soltero y virtuoso y que no cayó en la tentación de la carne. Solaiman (que la paz y las bendiciones de Alá sean con él) es un ejemplo fenomenal de rey justo, poderoso y rico, que nos enseña cómo utilizar nuestro poder y no practicar injusticia contra otras personas a nuestro cargo, tanto en la familia como en una empresa o un país. Sin embargo, el Mensajero Mahoma (que la paz y las bendiciones de Alá sean con él) es un ejemplo global, porque vivió de todo : estuvo soltero y casado, fue rico y pobre, ciudadano y gobernador, padre y padre de un hijo difunto, jefe y empleado... Se vio empujado por las circunstancias a cambiar de oficio tres veces. Es una historia rica que nos puede inspirar en nuestro día a día en todos los aspectos posibles. Gracias a esto aclararemos la verdad y además orientaremos a los jóvenes musulmanes que no encuentran más que historias de guerra. Podemos verdaderamente ayudar a ingenieros, médicos, autores y estudiantes entre otros.

Aquí va una anécdota: cuando el Profeta (que la paz y las bendiciones de Alá sean con él) estaba a punto de regresar a Medina después de una batalla, a 600 km de su llegada, los soldados querían apretar el paso porque echaban de menos a sus familias y estaban deseando reunirse con ellas. En cambio, uno de ellos, Jabir, iba cabizbajo y con ademán triste que llamó la atención del Profeta. Entonces, el Mensajero (que la paz y las bendiciones de Alá sean con él) se separó de los demás y se acercó a él para charlar. En esta conversación descubrió que este hombre tenía a su cargo a seis hermanas y a su mujer y apenas podía hacer frente a todos los gastos que eso conllevaba. El Profeta (que la paz y las bendiciones de Alá sean con él) sonrió y dijo:

-¿Me vendes tu camello?- le preguntó el Profeta a pesar de que era un animal viejo y enfermo.

-¡Sííí!.- respondió inmediatamente, pues pensaba que aquella venta le permitiría aligerar algunos de sus problemas económicos.

-¿Te doy un dirham?.- le preguntó bromeando

-Eso no sería justo.- respondió decepcionado

-¿Quizás dos?

-Quédatelo gratis, querido Mensajero de Alá.- queriendo acabar con la chanza del Profeta.

-Bueno, charlaremos de esto cuando lleguemos a Medina.


En cuanto llegaron, el Profeta le pagó 600 dirham y también le dijo que se quedara con el camello.

Mahoma era generoso. Incluso durante las batallas, siempre levantaba las manos y rezaba por los enemigos: "Alá, conduce a esta gente por el camino justo". Cuando liberó La Meca, historia que contaremos con detalle más adelante, tuvo la oportunidad de vengarse de los que habían intentado asesinarlo en el pasado pero él no dudó en liberarlos y dejarlos marchar. Esta decision sorprendió a todos a su alrededor. Justo después, Fodala un hombre del ejército de La Meca vino por la espalda con un cuchillo escondido para matarlo, pero el Profeta (que la paz y las bendiciones de Alá sean con él) le preguntó:

-¿Qué te dice tu conciencia Fodala?- sabiendo lo que había en la mente de este hombre.

-Me habla de Alá.


El Mensajero se dio la vuelta y en ese momento Fodala tuvo miedo. Pero el Profeta colocó suavemente la mano sobre su pecho, lo mirò a los ojos y le pidió que pensara en Alá y le pidiese perdón. Tiempo después Fodala contaba esta historia y decía :"Él era la persona que yo más odiaba, pero en ese instante se convirtió en la persona más amada".

Un día un hombre de Quraysh, miembro de la familia del Profeta (que la paz y las bendiciones de Alá sean con él), escribió un poema en el que se burlaba de él. Cuando un acompañante del Profeta (que la paz y las bendiciones de Alá sean con él) lo leyó, se indignó y propuso redactar una respuesta que fuera tan contundente que sacudiera a todos los habitantes de la Meca. Pero Mahoma (que la paz y las bendiciones de Alá sean con él) no entendía cómo era posible que su compañero pensara así y que quisiera insultarlos porque él se sentía uno de ellos, se mantenía fiel a su gente a pesar de la tortura, la humillación y los abusos que ellos cometieron contra él.

Era así con todo el mundo: generoso, paciente, amable, tierno, tranquilo, gentil y suave. Si lo hubiéramos conocido, lo hubiéramos amado y seguido.

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