23. Breakdown

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       Las palabras de Chan se habían clavado sobre la mente de Jiyong, quien acabó escondiendo la entrada a la fiesta de graduación de los niños entre sus cosas. De todos modos no tenía planeado asistir, tampoco estaba en su lista darles alguna respuesta y sin lugar a dudas aún no sabía si estaba completamente preparado para enfrentar a Asahi después de todo lo que ocurrió, no era como si el chico estuviese contento después de descubrir semejante mentira y tampoco era como si él tuviese las palabras correctas para hacerle saber que lo sentía.

       Dar la cara frente a Choi Seunghyun para decir la verdad se había llevado todo el coraje que le quedaba a Jiyong y eso incluía todo el que había estado reuniendo toda su vida para decir lo que sentía o lo que pasaba consigo mismo, al menos eso creía. Por lo que cuando Jongwoon apareció delante de él con un par de ticket con cinto dorado, tomó una decisión definitiva: Seunghyun no era motivo para arruinar su relación, ¿qué tanto podía estar enamorado de él si apenas acababa de conocerlo? ¿Realmente Seunghyun le daba todo eso que siempre quiso? 

       Ver la sonrisa de su prometido, la emoción de este al hablar sobre el inminente viaje a Las Vegas al día siguiente, le hicieron sentir que no estaba en condiciones y no tenía el derecho de arruinar los deseos que habían construido como pareja solo por una aventura. Aunque su corazón también le recalcaba una duda: ¿Seunghyun solo fue una aventura?




—¿En qué piensas? —Preguntó Jongwoon con el cepillo de dientes en las manos, su equipaje estaba a medio cerrar porque finalmente habían acabado de empacar. 

—No lo sé, estoy pensando en si es buena idea casarnos. 

—¡Por supuesto que es una excelente idea! Yo te amo, tú me amas. —Explicó como si fuera algo obvio. —No me dirás que ya no quieres cumplir nuestro sueño.

—No, no, claro que quiero cumplirlo. —Jiyong se colgó del brazo del chico y le sonrió. —Ya vivimos juntos, así que es bueno dar el siguiente paso.

—Y después de eso te ayudaré a encontrar un buen empleo. 

—¿Por qué piensas en eso ahora? Deberías decir que me llevarás una luna de miel. 

—Por eso vamos a las Vegas, cariño. —Respondió envolviendo al otro entre sus brazos y le dejó un beso en la frente. —Pero las cuentas no se pagan solas y ya llevas mucho tiempo libre. 

—Esto parece a algo que es idea de Youngbae, ¿no es así? —Cuestionó en un tono molesto, aunque Jongwoon ni siquiera lo notó. 

—Solo quiere vernos felices, cariño. —Insistió. —Me ayudó a escoger el anillo perfecto, pero lo verás mañana. 

—¿No debería escoger yo mi propio anillo? —Jiyong suspiró y recostó la frente en el hombro ajeno, intentando encontrar una respuesta que le asegurara que estaba bien que otros que lo "conocían" eligieran cosas por él. —Te vas a casar conmigo, no con mi mejor amigo. 

—Amor, nadie te conoce como él o como yo, como tu hermana, todos te vimos creces así que sabemos que querrás ser el mejor terapista infantil, así los dos trabajaremos con niños. Y que adoras las cosas simples, así que no será nada extraño para ti. —Murmuró y tomó el rostro de Jiyong plantando un beso casto en sus labios.

—Ah, claro... —Dijo con una sonrisa en los labios.




        Esa noche Jiyong se preguntó a sí mismo, cuándo tendría el valor para decir que no tenían la razón, él no quería trabajar con niños, había descubierto que prefería a los animales y que era bueno en ello, no quería algo simple, era una boda ¡Santa madre! quería el anillo más llamativo de todos para decirle al mundo que alguien lo amaba. No quería que Youngbae decidiera si debía trabajar después de casarse, quería hacerlo él; porque no era como si no lo hubiera pensado, lo que odiaba es que otros lo pensaran y planearan primero que él mismo, cuando se trataba de su vida y sus decisiones.

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