PLATÓNICAS

Capítulo 1

Estoy realmente nerviosa, hoy es mi primer día en la famosa unidad, Víctimas Especiales.
Salí de mi casa temprano, eran las ocho de la mañana.
Ya estaba arreglada y preparada para mi primer día.
Llegué al edificio y entré nerviosa al ascensor.
No sabía cuál piso era, maldita sea.
Cómo puedo según venir tan preparada y no saber el piso!?
Me puse nerviosa por no saber cuál botón presionar.
De pronto, entró al ascensor conmigo otra mujer.
Era castaña, su corte me encantaba, era original.
Llevaba un café en la mano.
Quería pedirle ayuda, pero me daba vergüenza hacerlo.
Perfecto!
Luego de presionar un botón, me miró con curiosidad.
- A qué piso va?
Oh dios mío! Me está hablando.
Comencé a tartamudear.
- No lo sé honestamente...
Ella me mostró una pequeña risa divertida por mi situación.
- A quién busca?
- Al Capitán Donald Cragen.
- Que suerte tiene, voy a ese piso.
Sonreí un poco y el silencio reinó el pequeño lugar, hasta que las puertas se abrieron.
Salimos juntas y me señaló donde estaba la oficina, pero justamente iba saliendo el Capitán.
- Oh, que bien que ya se conocieron, porque serán compañeras.
Nos miramos confundidas y luego mi mirada volvió a él.
- Olivia, ella es la nueva detective, Michelle Allen y Michelle, ella es la detective Olivia Benson.
Yo aún estaba en shock.
Me comporté como una boba con ella en el ascensor y sería mi compañera de trabajo.
En cambio, ella me sonrió con amabilidad y me ofreció su mano como saludo.
- Un placer conocerte, Mich... Puedo llamarte así?
Salí de mi trance y le sonreí de vuelta.
- Por supuesto! Y también es un placer conocerte, Olivia.
- Llámame Liv; ven, te mostraré tu escritorio.
La seguí hasta un escritorio vacío que estaba cerca del centro del piso, los escritorios están acomodados en parejas.
- Tu pareja llegará pronto.
- De hecho... Quiero que trabaje contigo y con Elliot.
El Capitán apareció detrás de Olivia y ella lo miró como si acabara de decirle que asesinó a su mascota o algo por el estilo.
- Pero...
- Fin y Munch serán compañeros y según el perfil de la detective Allen, ella trabajará mejor con ustedes.
Olivia no se veía convencida, pero decidió no seguir peleando.
Me levanté y me llevó a otro escritorio, que estaba conectado entre dos escritorios.
Supongo que el suyo y el de su compañero.
- Lo siento...
- No es tu culpa, Mich.
Me sentía un poco mal y excluida.
Ella no me quería en su equipo, ella quería un dúo, no un trío.
Sentí que sobraba.
No le dije nada más y acomodé mis cosas en mi escritorio.
Un rato después, llegó otro detective y se acercó al escritorio, luego me miró con curiosidad.
- Qué necesita, señorita?
- Es la detective Michelle Allen, es nueva, será nuestra compañera.
- Nuestra compañera? No somos niñeros para andar cuidando juniors.
Al instante caminó irritado hacía la oficina del Capitán.
Bajé la mirada, me sentía incómoda.
No se molestaban en ser discretos en que no me querían con ellos.
Olivia estaba a punto de decirme algo cuando el detective salió molesto y tomó su saco antes de irse.
El Capitán le gritaba cosas desde la puerta de su oficina.
Cuando terminó de gritar, nos miró.
- Ambas a mi oficina, ahora!
Me levanté nerviosa, según yo, no hice nada malo.
Ambas entramos y Olivia cerró la puerta.
- Por qué es una molestia tener a Michelle de compañera!?
Sentí un ligero nudo en la garganta.
Olivia no decía nada.
Levanté la mirada y la dirigí a ambos, primero a Olivia y luego al Capitán.
- No quería que los regañaran por mi culpa, no quería armar un escándalo, lo lamento, puedo trabajar con cualquier equipo, me adapto a todo, no se preocupen.
Salí de la oficina y comencé a empacar en la caja mis cosas otra vez, para regresar al otro escritorio y trabajar con los otros detectives.
Una foto de mi familia cayó y el marco se rompió.
- Mierda...
Estaba por agacharme por el cuando vi a Olivia haciéndolo por mí.
Me miró a los ojos cuando se levantó.
- Liv... Gracias.
Sonreí ligeramente y estuve por seguir guardando, pero ella tomó mis manos para detener lo que hacía.
- Lamento que Elliot te haya tratado así... No lo mereces.
No respondí, no sabía que decir, me sentía incómoda.
- Supongo que ya estábamos acostumbrados a ser solo nosotros dos, pero estoy segura de que una más no nos hará daño... Y pienso que será bueno tenerte de compañera.
No pude evitar sonreír con lo que dijo.
En serio me consoló.
- También pienso que será bueno tenerte de compañera.
Me sonrió de vuelta y esta vez me ayudó a poner todo en su lugar de nuevo.
Cuando terminamos, tomó mi abrigo, que estaba puesto en el respaldo de mi silla.
- Te parece si vamos por un nuevo marco?
- Claro.
Me ayudó a ponerme mi abrigo y estábamos por salir, pero en la entrada del edificio nos encontramos a Elliot.
- A dónde van?
Olivia me miró y luego a él.
Luego se paró entro Elliot y yo, como si nos separara.
- Iremos a comprar algo.
- Ahora son amigas? O acaso ahora ustedes son las compañeras y yo el excluido.
Escuché a Olivia suspirar, se escuchaba irritada.
- Tienes que aprender a trabajar con otros, Elliot; ella es buena y ha sido amable con todos, a pesar de que la hemos tratado tan mal.
Él se veía molesto aún.
- Nos va a estorbar, Olivia; no necesitamos una tercera opinión.
- Bueno, sabes algo? No me interesa si quieres trabajar con ella o no, pero es tu problema; si quieres hacer berrinche, hazlo, porque todos ya la recibimos como lo merece, si quieres comportarte como un niño pequeño, no me importa.
Tomó mi mano y me guió a la acera.
Entramos a un auto que no estaba muy lejos de la entrada y ella comenzó a conducir.
Ya en la tienda, veíamos todos los marcos y decidí agradecerle.
- Gracias por defenderme... Y lamento haber causado una pelea entre Elliot y tu.
- Casi siempre estamos discutiendo y... Deja de disculparte, tu no hiciste nada malo, Mich.
Me sonrió de la forma más dulce que alguien me ha sonreído en la vida y no pude contener una sonrisa con un poco de sonrojo.