Capítulo 21

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Hace cinco meses que sucedió la muerte de William Lewis, lamentablemente hubo juicios contra Olivia porque se sospechaba que ella lo había matado, pero nuestro Capitán temporal la ayudó y le hizo ver al jurado que lo mejor que pudo haber sucedido es que él muriera.
Olivia estuvo tres meses muy afectada, a veces incluso le afectaba en el trabajo, muchas veces la mandaron a casa.
Ahora aún no está totalmente bien, pero esta mejor, se ve ese brillo en sus ojos de nuevo.
Sientes esa felicidad al estar alrededor de ella de nuevo, lo cual me parece muy bueno.
Extrañaba verla feliz.
Llegué a su nuevo apartamento y toqué la puerta.
Tardó unos minutos y luego me abrió.
- Estas lista?
- Si, gracias por acompañarme.
Salió y cerró la puerta y caminamos al ascensor.
- No me agradezcas, me parece algo muy lindo lo que haces.
- Si... No me gusta ver a ese pobre bebé solo..
Vi una sonrisa cálida en su rostro y me hizo sentir muy bien.
Salimos del edificio y entramos en su auto.
Condujo hasta el tribunal familiar, llegamos justo a tiempo para el juicio.
Solo observábamos, no éramos parte del juicio, pero Olivia ha estado interesada en el pequeño.
Estábamos solo paradas en el marco de la entrada.
Podía ver esa chispa especial en los ojos de Olivia mientras veía al pequeño.
Y hace un tiempo, ella estaba muy ilusionada porque creyó estar embarazada, pero no lo estaba.
Ella quiere sentir ese amor en su vida... El de un hijo.
- Sargento Benson, otra vez aquí?
Ella reaccionó al escuchar que la jueza se dirigió a ella.
- Oh... Si, señoría.
La jueza asintió y se mantuvo mirándola.
- He tomado una decisión... Ya que la Sargento Benson ha sido la única que ha demostrado interés en este bebé... Le gustaría tenerlo bajo su cuidado temporalmente y en un año decidir si le gustaría adoptarlo?
Liv se quedó muda, se veía sorprendida.
Una sonrisa se dibujó en su rostro y sus palabras volvían a salir.
- Sería un honor, señoría.
La jueza sonrió y sonó ese martillo.
- Bien, esta decidido.
Olivia me miró, sus preciosos ojos reflejaban felicidad.
Me abrazó.
- No puedo creerlo..
La emoción se captaba en su voz, sentí muy lindo al verla así.
- Felicidades, Liv! Lo mereces y ese pequeño a ti!
Nos dirigimos a una clase de sala de espera y dos mujeres llegaron con el pequeño.
Olivia lo tomó en brazos y comenzó a darle besitos.
- Hola caballerito..
Sus ojos se humedecian, pero era por felicidad.
Me miró y no pude evitar sonreír al ver esa escena tan hermosa.
Me acerqué y los abracé, ne sentía en un verdadero hogar.
Al salir, nos dirigimos al apartamento de Olivia.
Mientras ella llenaba papeles, yo compraba todo lo necesario por Internet y solo pasábamos a las tiendas a recogerlo.
- Gracias por esto, Elle..
- No me agradezcas, todo es por ti y por Noah.
Vi su bella sonrisa aparecer.
Llegamos a su apartamento y Olivia alimentó a Noah mientras yo armaba la cuna.
Nunca creí hacer esto alguna vez.
Olivia y Noah llegaron y yo ya habia terminado.
- Wow! Mira nada más, mami Elle es constructora de cunas.
Me reí por eso mientras ponía cobijas dentro.
- Es más fácil de lo que creí... Y como que mami?
- Prefieres tía Elle?
- No, pero me sorprendió.
Dejó a Noah y se acercó a mí.
Sus manos tomaron mi cintura y me acercó a ella.
- Gracias por siempre estar aquí..
- Nunca me iré a menos que tu me lo pidas.
Nos abrazamos y me sentí en paz.
Al separarnos, me acerqué a Noah y vi que ya estaba dormido.
Lo miré con ternura.
Luego sentí el cuerpo de Olivia pegarse a mí por detrás.
- Tengo ganas de besarte.
Sentí miles de mariposas por mi estómago cuando lo dijo.
Me giré para mirarla y sonreí.
Ella se inclinó para besarme, pero me aparté.
Caminé hasta su habitación y le sonreí, indicándole mis intenciones.
Ella sin pensarlo, me siguió.
Al estar paradas en la orilla de la cama, comenzamos a besarnos.
Sus manos entraron bajo mi blusa.
Sus dedos estaban cálidos y se sentía bien su tacto contra mi piel.
Esas ágiles manos desataron mi brazier y sujetaron con cariño mis pechos.
Me provocó un jadeo.
Mis labios bajaron a su cuello y lo disfruté.
Me levantó los brazos para quitarme la blusa.
Mis pechos estaban ya descubiertos.
Me jaló de la cadera para acercarme y al instante mi pecho entró entre sus labios.
Su lengua provocó un escalofrío en mí en cuanto me tocó.
Solté un gemido con eso.
Mis manos desabrocharon su pantalón y me separé de sus labios para bajarlo.
Alcé su blusa y dejé besos húmedos en su vientre y abdomen.
Ella se quitó la blusa para darme acceso fácil.
Bajé su ropa interior y se recostó en la cama.
Sus piernas estaban abiertas, dándome el honor de probar su delicioso cuerpo.
Me acerqué y primero le quité el brazier.
Bajé a su intimidad y comencé a lamer.
Ella se retorcía y gemia.
Me parecía muy excitante.
Luego de su orgasmo, estábamos por seguir, pero Noah despertó y comenzó a llorar.
- Mierda... Creo que debo ir.
La miré con una sonrisa y le di un delicado beso en los labios.
- Ve a salvarlo, super mamá.
Ella sonrió de la forma más brillante y hermosa que he visto.
Se levantó y se puso una bata encima antes de dirigirse a ver que sucedía.
Me quedé acostada en su cama, pero solo fueron unos segundos.
Me levanté y me desvesti por completo para después vestirme con un short mío y una playera de Olivia.
Es una playera blanca que ella usa a veces para dormir.
Me encanta usar su ropa porque tiene su aroma y me hace sentir tranquilidad.
Me dirigí a donde estaban ellos.
Vi a Olivia en el sofá, con Noah en manos.
Lo abrazaba y le cantaba para ayudarlo a dormir.
Fue la cosa más preciosa y adorable que he presenciado.
Sentí unas perfectas mariposas en mi estómago, afirmandome mis fuertes sentimientos por esa mujer.

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