PLATÓNICAS

Capítulo 20

Era Lunes por la mañana, Olivia y yo estábamos camino a la estación, pero pasamos por un café.
Pedimos nuestros cafés y nos alejamos del pequeño puesto.
Yo le soplaba a mi café, por la alta temperatura en la que estaba y el celular de Olivia sonó.
- Sostienes mi café, cariño?
Asentí y lo tomé en la mano que me quedaba libre.
Respondió a la llamada, yo no alcanzaba a ver quién era, pero se escuchó una voz.
"Hola cariño, me extrañaste?"
Mi mente reconoció la voz, pero era imposible, él estaba en prisión.
Vi el rostro de Olivia.
Estaba pálida, sus ojos reflejaban temor.
- Liv...
- No puede ser...
Me miró y con esa simple mirada me indicó que mi sospecha era cierta... Lewis escapó de prisión.
En mi garganta se formó un nudo, al ver a Olivia comenzar a alterarse.
Sin darme cuenta, mi primer reflejo fue soltar los cafés y dejarlos caer.
Tomé a Olivia entre mis brazos.
Su cuerpo temblaba, su respiración iba muy rápido y podía escuchar a su delicado corazón latiendo.
- No otra vez...
- No te hará daño, estoy aquí, esta vez estoy aquí.
Cerré mis ojos mientras lo decía.
La verdad es que tengo mucho miedo, no la dejaré sola de nuevo, pero no sé que mierda hacer si nos encontramos cara a cara con Lewis.
- Liv... Debemos ir a la estación.
Ella asintió y nos dirigimos allá.
Al llegar, al parecer ya todos estaban enterados de la noticia e incluso ya había más personal de otras Unidades, ayudando.
Todos traían chalecos anti balas.
El Capitán de la otra unidad se acercó a nosotras.
- Ambas pónganse un chaleco, ahora, en especial tu, Olivia.
Obedecimos la orden y nos acercamos a la investigación.
- Bien, la información que tenemos hasta ahora es que Lewis tiene a una niña de doce años secuestrada.
Olivia suspiró cansada al escucharlo.
- Me quiere a mí, quiere llamar mi atención.
- Así es Sargento Benson, es por eso que usted se quedará bajo cuidado, hasta que todo esté bajo control.
- Qué!? No! No dejaré que dañe a esa niña!
- Nada le garantiza que una vez que la tenga usted no le hará daño a la niña!
El ambiente era pesado, pero esa comprensible, todos estábamos preocupados en este momento.
Olivia quedó bajo cuidado de dos detectives de otra unidad, aunque claro que también bajo el mío, ya que no volveré a dejarla sola.
No correré ese riesgo de nuevo.
Ella estaba desesperada, tenía miedo por ella misma, por la niña y por cualquiera a quien Lewis pudiera lastimar.
...
Días, días y no teníamos a Lewis, es un maldito psicópata y es muy listo.
Todos estamos hartos, aunque afortunadamente no le ha hecho nada a la niña.
Lo único que ha pedido es que Olivia confesara al mundo que lo golpeó cuando él ya estaba discapacitado y bajo control.
Aunque en realidad, a algunas personas no les importo, y la verdad no es nada comparado con lo que él le ha hecho a muchas mujeres de distintas edades.
Estábamos los cuatro en un pequeño restaurante comiendo, los detectives, Liv y yo.
Olivia pidió ir al baño y la detective la acompañó.
Unos minutos después, ella volvió.
Pasó un buen rato y Olivia no regresaba, la preocupación crecía en mí, así que me dirigí al baño, pero entrar, no había nadie.
El pánico me invadió.
Todos los peores escenarios llegaron a mi cabeza.
Corrí a los detectives y la buscamos por todo el restaurante, preguntamos y nos indicaron haberla visto tomando un coche desconocido e irse.
Olivia iba a entregarse a Lewis, maldita sea.
Estaba enojada conmigo misma, de nuevo no la cuidé.
Conduje a la estación y comenzamos todos a buscar su ubicación.
Ubicamos una enorme fábrica abandonada.
Todos nos dirigimos hacía el lugar.
Era enorme, así que no dividimos.
Amaro y Rollins iban juntos, Fin y yo íbamos juntos.
Estábamos alertas a cualquier ruido o movimiento.
De pronto, se escuchó nuestra radio sonar.
- Hola detectives, probando, probando... Les habla su servidor, William Lewis.
El pánico se sentía en el aire.
Todos nos quedamos atentos escuchando a Lewis.
- Estamos jugando a la ruleta rusa y es el turno de la Sargento Benson, que ahora está tomando el arma.
Todo se quedó en silencio un rato.
La desesperación crecía.
- Bien, ahora es mi turno..
De nuevo, hubo silencio.
- Parece que nuestra ganadora del tiro final es la Sargento Benson, quién ahora tiene el arma en la mano, despidanse de su amada.
Y luego la radio se apagó.
Mis lágrimas comenzaban a salir.
El maldito la mataría...
Tomé el radio y lo lancé, me sentía furiosa.
Y de pronto se escuchó un balazo unos pisos arriba, luego el grito de la pequeña.
Todos subimos a gran velocidad.
Mi miedo crecía con cada escalón que subía.
Pero al llegar hasta arriba, vi a Olivia, viva...
Una tranquilidad enorme me recorrió el cuerpo.
Me acerqué, se veía en shock, su rostro estaba salpicado de la sangre de Lewis y sus manos y tobillos estaban esposados a una mesa.
- Liv...
Me acerqué para quitarle las esposas y la miré.
- Terminó Liv... Esta muerto.
Ella comenzó a negar con la cabeza y a llorar.
Me abrazó y me sentí en serenidad al tenerla entre mis brazos.
Ella no decía nada, estaba procesando todo lo que había sucedido.
La llevé a una patrulla y Nick conducía.
Íbamos camino a la estación.
- Liv... Él te violó?
Miré a Nick algo incómoda.
Pero Olivia no tardó en contestar.
- Estuvo a punto de hacerlo... Pero cuando notó que yo no luchaba, se molestó y no lo hizo...
El nudo en mi garganta se hacía al escucharla decirlo.
Todo por lo que pasó.
Y en ese momento, Olivia se soltó a llorar en mis brazos.
- Me besó el cuello...El rostro... Me siento tan asquerosa.
Mi alma se apretó de forma horrible al escucharlo.
- Tranquila... Iremos a tu apartamento en un rato y te ayudaré a ducharte, esta bien?
Ella me indicó que sí con la cabeza.
Se veía en serio muy mal.
Y de pronto..
Nos dijeron que por el ángulo del disparo, pareciera que Olivia le disparó, cuando ella dice que él se suicidó frente a ella.
La está inculpando.
Incluso muerto la esta torturando...