JAIDEN MÜLLER
Ya me acostumbré que tengan una perspectiva de mí que en su gran parte suele ser errada o muchas veces ni siquiera me molesto en corregirlas, ¿por qué lo haría? Es lo que todos asumen, pues entonces que lo hagan. Pero en estas circunstancias no quiero que él asuma que soy un adolescente que se mantiene ignorante de todo lo que me rodea; sé de las múltiples consecuencias de las acciones y como cada una de ellas me jodería muchísimo. Es verdad que hay demasiadas cosas en las cuales tengo conocimientos nulos, en las que podrían tomarme como idiota y, aun así, quiero arriesgarme un poco sin importar las consecuencias. Aun sabiendo todo el desastre que podría suceder, quiero arriesgarme tan solo un poco en vivir mi propia vida.
Me parece bastante estúpido sentir miedo de tan solo hacer algo con mi vida, en tomar una mínima decisión y realmente no quiero sentirme de esta manera de por vida. He estado esperando graduarme o cumplir mis dieciocho para recién enfocarme en mi propia realidad. Pero siempre he pensado que no tendría que estar esperando mi mayoría de edad para empezar a vivir; hay tantas cosas que se supone ya debería haber experimentado o estar experimentando, pero que por miedo estuve evitando y ahora siento que he perdido mucho.
Lo único que ni en sueño quiero volver a experimentar son las fiestas. No, claro que no pienso volver a pisar una y esta vez no correr con la misma suerte.
Pero, ¿por qué él? Es que esa respuesta aun no la sé.
—¿Tiene miedo, profesor suplente?
Acorta la distancia sosteniendo mi rostro en sus manos, siento como la yema de sus dedos acarician mis mejillas y su mirada se mantiene fija en mis ojos. Aprieto los labios sintiéndome ligeramente acalorado por su mirada y por ese tacto tan delicado y... ¿cariñoso?
—Claro que tengo miedo de que salgas dañado, Bambi.
—Estoy haciendo el intento de no tener miedo, no quiero tener miedo.
—Estás siendo muy valiente, pero no voy a correr ese riesgo.
Por supuesto que esperaba que dijera algo así, no esperaba que estuviera interesado de inmediato y comprendo su negativa ante algo arriesgado. ¿Quién en su sano juicio querría arriesgar muchas cosas solo por un adolescente? Exacto: nadie haría semejante estupidez. Aun así, por más negativa que me dé no pienso darme por vencido rápidamente porque no estoy diciéndole que empecemos una relación de inmediato cuando soy completamente consiente que merece y necesita una persona que comparta el mismo grado de madurez que él tiene, que este en su mismo nivel de conocimientos. Solo le estoy pidiendo, de alguna manera, la posibilidad de conocernos a grandes rasgos y esperar los resultados más adelante; es como ser amigos que esperan un avance.
Levanto la mirada a su rostro.
—Lo siento, pero yo si lo haré —indico esbozando una sonrisa, él se mantiene en silencio y gracias a que la luz vuelve en este preciso momento logro ver su rostro inexpresivo que porta. Me muevo en el sofá acercándome un poco más, pero todavía manteniendo una distancia prudente. El profesor suplente apartando las manos de mi rostro levantándose del sofá suspirando y pasándose las manos por la cabeza—. Puede verlo como una prueba para la modalidad Premium, ¿qué le parece? Si después no está interesado, simplemente lo cancela y listo, nada sucedió. En la cafetería le dije que no tenía miedo a enamorarme y usted parecía tener más claro lo que quería, pero ahora parece lo contrario.
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La teoría imperfecta del amor
Teen FictionAzrael siempre ha tenido una vida complicada, quizás se le complico aun más cuando su mejor amiga murió o quizás siempre fue así solo que ella lo hacia sentir todo de una mejor forma. A pesar que desde esa muerte él ha sido completamente distante d...