El lado bueno de las cosas (Chaesoo)

Mi historia

En el transcurso del día, Rosé no dejaba de pensar en lo que había dicho Jihyo con respecto a Lisa y Jisoo ¿sería verdad que habían ido a buscar a unos alumnos para amenazarlos? Eso era algo que le costaba mucho trabajo poder creer, es decir, ellas habían sido muy amables desde que había llegado a la escuela, además estuvieron con ella después de haber salido del hospital, tuvieron ese lindo detalle junto con todos los alumnos cuando ella regreso.

Eran muchas sus dudas, y la única persona que podría darle las respuestas a todas sus preguntas, era Jisoo. Así que esperaría a la hora de salida para poder hablar con ella, y saber que era lo que sucedía.

En el almuerzo las chicas presentaron a Jihyo con Lisa y Jisoo, las dos chicas fueron muy amable con ella y le dijeron que cualquier cosa con gusto le podrían ayudar, el día fue muy tranquilo, almorzaron a gusto entre platicas y risas, después se fueron a sus clases y cuando fue la hora de salida, Rosé le había dicho a Jennie que se fuera sin ella, algo que tomó por sorpresa a la castaña, ya que siempre se habían regresado juntas, pero sobre todo, no le gustaba que Rosé estuviera sola, más que nada por los episodios que solían darle, era verdad que últimamente había estado muy bien, pero sabían que no podían bajar la guardia.

Rosé: por la cara que pones a lo que te acabo de pedir, me imagino que te preocupas, y te lo agradezco mucho, pero tranquila, Jisoo dijo que quería acompañarme.

Jennie: uuff, eso me lo tenías que haber dicho desde el principio, de acuerdo, ve con ella, cualquier cosa sabes que me puedes marcar.

Rosé: lo sé, no te preocupes, ve con cuidado.

Jennie: lo haré, tú también ve con cuidado, bueno, me voy, seguro Lisa me está esperando, te quiero.

Rosé: yo también te quiero.

Se despidieron, al igual con Nayeon y Jihyo, y después Rosé se dirigió a la salida, ahí ya se encontraba Jisoo esperándola, en cuanto la vio se le dibujo una sonrisa en los labios, esa chica lograba que su corazón sintiera mucha paz.

Jisoo: tardaste, - le dijo mientras la tomaba de la mano y le daba un beso en la mejilla, - hace rato salió Jennie, me dijo que ya venias, pero, tardaste un poco más.

Rosé: lo siento, es que tuve que guardar mis cosas en el casillero antes de salir.

Jisoo: está bien ¿nos vamos?

Rosé: claro, pero, sabes antes me gustaría hablar contigo.

Jisoo: ¿hablar? Claro ¿sucede algo?

Rosé: ¿podemos ir a otro lugar?

Jisoo: a una cuadra hay un pequeño parque ¿quieres ir ahí?

Rosé: sí, me parece un buen lugar para platicar a gusto.

Jisoo: perfecto, entonces andando.

Tomadas de las manos se dirigieron a ese parque, Jisoo no sabía que esperar, se le había hecho un poco extraño que de pronto Rosé quisiera hablar con ella, es decir, en el almuerzo todo había sido de lo más normal, y por alguna razón, sentía un poco de nervios en ese momento. Llegaron y buscaron una banca en donde pudieran sentarse y hablar.

Jisoo: bien, dime ¿qué sucede?

Rosé: ¿estás metida en algún problema?

Jisoo: ¿qué? No, claro que no ¿por qué me preguntas eso?

Rosé: porque, el día de hoy me enteré de que Lisa y tú iban a otro colegió a amenazar a algunos alumnos.

Al escuchar eso, Jisoo comenzó a reír, ahora entendía que era lo que estaba sucediendo, al ver que Rosé tenía una mirada de confusión, se detuvo, y la tomó de la mano.

Jisoo: perdón, me causo un poco de risa el concepto en que nos tienen en otras escuelas.

Rosé: me quieres contar porqué es tan gracioso.

Jisoo: hay algo que quería contarte, de hecho, pensaba hacerlo hoy, era una de las razones por las que quería acompañarte a tu casa.

Rosé: ¿sucede algo malo?

Jisoo: no, claro que no, verás Rosé, Lisa y yo vamos tres días a la semana a un grupo de apoyo, lo hemos hecho desde que tenemos 13 años, fue ahí donde nos conocimos.

Rosé: ¿por qué? ¿qué es lo que les sucede?

Jisoo: las dos, pasamos por un momento traumático en nuestra niñez, ella, perdió a su hermano y yo, bueno, perdí a mi padre, los dos sufrían de depresión, y los dos tomaron la decisión de terminar con su vida.

Rosé: por dios, lo siento mucho, Jisoo.

Jisoo: gracias, de cualquier forma, las dos comenzamos a asistir a esos grupos, para poder escuchar a otras personas, saber cómo ha sido su vida al tener una enfermedad mental, y algunas otras como han superado la pérdida de un ser querido, como nosotros.

Rosé: ¿es por eso por lo que estás conmigo? ¿tienes curiosidad de saber que se siente estar con alguien como yo? – pregunto, y su voz sonaba un poco decepcionada. –

Jisoo: no, claro que no, tú me gustas mucho Rosie, jamás haría algo como lo que acabas de decir, tu enfermedad no tiene nada que ver con lo que siento por ti.

Rosé: ¿de verdad?

Jisoo: te lo juro, - le dijo mientras le daba un breve beso en los labios y le sonreía. –

Rosé: lo que hacen Lisa y tú, es algo muy noble y admirable, pero, sigo sin entender porque iban a otro colegio.

Jisoo: bueno, en el grupo hay dos chicos que son de nuestra edad, sus nombres son Xiumin y Chen, los dos fueron diagnosticados con ansiedad severa, y ha sido muy difícil para ellos, ambos van al mismo grupo que nosotras, y a veces uno de sus mejores amigos de nombre Kai, nos manda mensajes para que vayamos a verlos, al estar él sólo, ha sido difícil poder ayudar a sus amigos, así que nosotras íbamos a su escuela y trabamos de apoyarlos.

Rosé: entiendo, al sufrir ansiedad, su estado de ánimo estaba por los suelos, lo sé yo muy bien.

Jisoo: así es, siempre íbamos y los buscábamos, la gente nos veía con ellos y seguramente al ver sus rostros tan deprimidos, pensaban que quizás los estábamos regañando... o amenazando.

Rosé: sí, tienen esa fama en ese colegio.

Jisoo: mejor no se lo digamos a Lisa, es seguro que se sentirá orgullosa por eso.

Rosé: creo que ya es demasiado tarde.

Jisoo: ¿por qué lo dices?

Rosé: porque seguramente Jennie le ha de estar haciendo las mismas preguntas que yo a ti en estos momentos.

Jisoo: ¿de verdad creíste que andábamos por ahí amenazando a las personas?

Rosé: no lo sé, quizás tú no, pero, de Lisa, sí lo creí... un poco.

Jisoo: Lisa lo que hace es coquetear con las chicas de otras escuelas, aunque, creo que eso ya no lo hará más, al menos que quiera que Jennie la golpee.

Rosé: es verdad... pero ¿tú también andabas coqueteando con otras chicas?

Jisoo: no, claro que no, solo comencé a coquetear con una linda chica con la que choqué dos veces.

Rosé: ¿de verdad?

Jisoo: de verdad.

Entonces se acercó a ella y la besó, estaba feliz de poder ser sincera con ella, de poder decirle todo sin filtros, ser ella misma, Rosé se sentía de la misma forma, era agradable tener a una persona como Jisoo en su vida.

En ocasiones hablar con otras personas, poder ser sincero con ellos, te ayuda mucho, saber que sin importar nada, no te van a juzgar, y que será todo lo contrario, que te apoyarán o incluso te acompañarán en lo que sea que estés haciendo, es incluso, mucho más efectivo que cualquier otra cosa, y te ayuda mucho para poder seguir adelante.