Alonne...

~Capitulo 9~

                   Vivian Coleman

Carl trajo lo que Hershel necesitaba y al parecer a Lori no le pareció adecuado que Carl se arriesgará y empesaron a tener una pelea.

Por un lado entendía a Lori, ella no quería que su hijo corriera peligro, pero Carl ya no era un bebé, lo estaba sobre protegiendo demasiado.

-Nos hacia falta y lo conseguí- dijo Carl a su madre.

-Lo aprecio mucho pero- Lori no pudo seguir hablando ya que Carl la interrumpió.

-¡Entonses déjame en paz!- dijo el niño.

A la madre, la pelea está buena, ¿que digo?, esto es algo serio Vivian concéntrate.

-¡Carl!- lo regañó Beth- Es tu madre, no puedes hablarle así- le dijo la rubia.

Se formó un silencio muy incomodo.

-Es genial que quieras ayudar- Lori no pudo terminar la frase ya que Carl salió corriendo, paso por mi lado y me dio una mirada de odio.

Definitivamente me odiaba.

Lori bajó la mirada y siguió atendiendo a Hershel.

Me sentí algo mal por ella, Carl no debió hablarle así, aunque ella tampoco debió tomar haci la cosa.

Me fui con Gleen, la compañía del coreano era muy divertida.

-Holaaaa chino- dije colgandome de su espalda como una niña pequeña.

-Soy coreano, no chino- dijo mientras yo me bajaba de su espalda.

-Como digas- dije sarcásticamente.

-Eres demasiado sarcástica- se quejo.

No me digas, si no me dice no me soy cuenta (nótese mi sarcasmo)

-No me habia dado cuenta- dije mirandolo con una sonrisa burlona.

El me fulminó con la mirada.

De la nada algo le cayo a Gleen en la cabeza.

Mire hacia arriba y casi doy un grito al ver lo que tenía encima.

Mierda, mierda, mierda.

-¿Que tengo en la cabeza?- pregunto al ver mi expresión de pánico.

-Una cucaracha Gleen, eso tienes- dije alejándose un poco de él.

Gleen empeso a gritar como un loco mientras trataba de quitarsela.

-¡Quitamela, quitamela!- se quejo mientras corria por la habitación.

La cucaracha se cayó de su cabeza y cayó a el piso, Gleen dio un suspiro de alivio.

Gleen se acercó a mi ignorando olímpicamente la cucaracha y me dijo.

-Gracias por la ayuda- dijo mirandome mal.

-Yo no iba a tocar a esa cosa- dije apuntando a el lugar donde se encontraba el bicho.

Pero ya no estaba ahí.

De la nada Gleen dio un grito causando que yo me asustara, el apunto hacia atras, me di la vuelta confundida y cuando vi lo que apuntana entendí porque gritaba.

La cucaracha estaba volando.

¡La puta cucaracha era voladora!

Gleen y yo estábamos gritando como unos completos locos mientras corriamos de la cucaracha que nos perseguía mientras volaba.

-¿Que esta pasando aqui?- pregunto un Daryl muy irritado.

Gleen y yo ni nos molestamos en dejar de correr y gritar.

-¡Una cucaracha!- grito Gleen como todo un macho.

-¿Por eso gritan?- pregunto otra vez el hombre de la ballesta.

-¡Es voladora!- esta vez la que grito fui yo.

-¡Ya pare de correr y mató a la cosa esa!- dijo Daryl ya harto de nuestros gritos.

Gleen y yo salimos de la celda y esperamos a que Daryl matara a cucaracha.

En esas salió Daryl.

-¿Enserio gritaban por este bicho?- pregunto mientras pateaba el cuerpo inerte de la cucaracha hacia mi.

Di un grítico y me pare antes de que me tocara.

-Que cobardes- dijo Daryl burlándose.

-No soy cobarde- se quejo Gleen.

-Lo dise el que apenas vio una cucaracha voladora empeso a gritar como todo un hombre- dije rodando los ojos.

-¡Tu tambien estabas gritando!- se defendió en el coreano.

-¡Yo soy la pequeña!- contraataque.

-Estupidos- dijo Daryl y se fue junto con Gleen,  a el cual iba arrastrando de la camisa.