Alonne...

~Capitulo 63~

Carl Grimes

Ella no merecía ser abandonada por su padre, ella merecía sentir el amor paternal de uno, el mismo que yo sentí con el mío.

¡todos en este puto merecemos tener un jodido padre en nuestras vidas!

Iba a volver a pegarle pero entonses, mi padre me lo impido, junto con Michonne y Tara que llegaron corriendo al igual que los demás.

-¡Calmate Carl!- dijo mi padre mientras trataba de calmarme para que no fuera corriendo a partirle la cara a Abraham.

-¡El la abandono! ¡Y también la golpeó! ¡todos escuchamos cuando la cacheteo en esa habitación!- grite furiosa removiendome en lo brazos de Tara y Michonne como un gusano- ¡Y no fue una! ¡noo! ¡fueron dos!- escupió con enojo.

-¡Okey! ¿Quieres deformarme la cara? ¡bien! Lo harás, pero ahora hay que ir y ayudar a Vivian, cuando estábamos peleando ella piso una tabla floja y cayó hacia abajo, esta herida- avisó con el miedo rondando en sus azulados ojos.

Todos fueron corriendo hacia dicha habitación y tanto Michonne como Tara me soltaron para ir con ellos, entonses mire a Abraham.

-Se que me odias, ella también lo hace, tienen sus razones, pero este es nuestro asunto chico, no te metas en nuestros probelmas de familia- dijo.

-Resulta que ahora también soy familia- dije y el me miro confundido.

-¿De que putas mierdas hablas?- dijo confundido.

-Soy Carl Grimes, el novio de Vivian, futuro esposo, probablemente padre de sus hijos- dije con una enorme sonrisa, el me miro boquiabierto, y entonses le pase por el lado y camine hacia donde estaba Vivian.

El grupo estaba reunido en una enorme montonera y tuve que empujar a varios para poder ver a mi chica.

-¿¡Vivian estas bien!?- grito Michonne mientras miraba a la chica que a duras penas se lograba divisar entre la oscuridad del lugar en el que había caído.

Esto no me da buena espina.

-¡Bueo, una varilla de metal me atravesó la pierna y me duele todo el estupido cuerpo! ¡sin contar que hay un olor poco confiable aquí adentro!- dijo de forma sarcástica.

Esa es mi chica.

-¿¡Puedes moverte para ayudarte a subir!?- pregunto Gleen.

-¿¡Que no oíste la parte en la que dije que una puta varilla me atravesó la pierna, jodido coreano!?- grito malhumorada.